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ASUNCIÓN.- El subsidio a los campesinos sería peor que la condonación. Entregarle 34 millones de dólares, en efectivo, a Elvio Benítez y sus secuaces, sería como tirar el dinero en un saco roto. Harían “vito” con el dinero de todos los habitantes de este país. Este personaje, aunque no aparece como líder entre los actuales manifestantes, también está metido entre ellos.
Según los datos, ya hay respuestas como la Ley de Rehabilitación Financiera y los subsidios consistentes en proyectos productivos como en preparación de terrenos, entrega de semillas, entrega de insumos. Sin embargo, los campesinos siguen exigiendo y ahora quieren también dinero en efectivo.
La entrega de subsidio en nuestro país tiene nefasto antecedente. El gobierno de Luis Ángel González Macchi habilitó una millonaria línea de crédito para la cosecha de sésamo a organizaciones campesinas lideradas por Elvio Benítez. Éste recibió más de 500.000 dólares, con el aval del entonces obispo de San Pedro, Fernando Lugo. El dinero se esfumó y Benítez fue acusado de defraudación y estafa al Estado paraguayo, pero todo terminó en el folclórico oparei.
Igualmente, durante su gobierno, Lugo dispuso la entrega en una primera etapa G. 20.000 millones a la desconocida fundación Tesãi Reka Paraguay, que fue la encargada de distribuir el dinero entre las organizaciones campesinas para el acopio del sésamo.
El sistema es de dudosa legalidad, pues el dinero debe ser administrado por un organismo gubernamental, como el Ministerio de Agricultura. La ONG era presidida por el sindicalista José Parra, quien dijo que la misma tiene 15 años, pero de acuerdo a versiones, el que la manejaba directamente era el líder campesino Elvio Benítez.
Por otra parte, en el 2014, el actual gobierno también entregó subsidio a los campesinos. Fue por la consecuencia de las pérdidas en la producción de chía. Ellos habían realizado un cierre de rutas en la zona de Santa Rosa. En ese entonces, se instaló una mesa de trabajo, luego de haber llegado a un acuerdo para la entrega de subsidios de US$ 300 y con varias reivindicaciones. A partir de la instalación de una mesa de trabajo se fueron ejecutando acciones, encarando esta problemática. El 2015, a partir de julio y agosto, un grupo de esta Coordinadora de Igualdad de Oportunidades se abrió de la negociación y este es el encabezado por Elvio Benítez, su hermano Diosnel Benítez y Luis Cabrera, quienes siempre sacan grandes tajadas.
El 23 de abril del año pasado, el gobierno y un grupo de campesinos firmaron un acuerdo. Dentro de los puntos fijados en el documento figuraba el resarcimiento de G. 10.000 millones a diez mil familias que formaban parte de las organizaciones. Este monto fue transferido en su totalidad a las cuentas bancarias de estas organizaciones campesinas.
