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Aunque tanto los diputados de Honor Colorado como de Colorado Añetete manifestaron que apoyarían el juicio político a Javier Díaz Verón, fiscal general del Estado, siempre que el proceso fuera serio y bien hecho, no parece claro que estén dispuestos a votar a favor en la sesión extraordinaria del martes 23 próximo. Por de pronto, solo estarían asegurados 26 votos, y faltan 27 para tener la mayoría necesaria.
ASUNCIÓN.- No es que los legisladores colorados pretendan vender la idea de que Díaz Verón es inocente del delito de enriquecimiento ilícito por el que se lo está investigando. La sospecha que existe es que el pedido de juicio político, presentado por diputados liberales del sector efrainista no es más que una acción oportunista, que pretende conseguir rédito político, en lugar de aguardar que los órganos jurisdiccionales actúen al respecto.
Tanto Walter Harms, de Honor Colorado, como Dany Durand, de Colorado Añetete, habían dicho días atrás que sus bancadas no tienen la intención de dar impunidad al fiscal general, sino que pretenden que el juicio político esté bien planteado y responda a lo que la ciudadanía aguarda.
Para que se apruebe el libelo acusatorio en contra de Díaz Verón, la Cámara de Diputados necesita 2 tercios de votos, es decir, 53 senadores deben dar su acuerdo. Hasta ahora, el planteamiento tiene seguros 26 votos, entre liberales efrainistas y otras bancadas de la oposición, pero se mantienen en duda los 46 diputados colorados y los 8 liberales llanistas. Es decir que, para llegar a la mínima mayoría de 53, todavía faltan 27 votos, que se deberán obtener de alguno de estos sectores.
Mientras Harms había dado indicios de que el oficialismo colorado podría apoyar el enjuiciamiento, otro oficialista, el senador Gustavo “Pipo” Alfonso, afirmó ayer que el juicio a Díaz Verón es una suerte de “linchamiento mediático”.
Y esto es, precisamente, lo que preocupa a las 2 bancadas de la ANR en la Cámara de Diputados, que este pedido del oficialismo liberal no sea más que un show mediático que forme parte de un esquema de promoción política para sus candidatos en un tiempo tan electoralista como este. Por eso, Alfonso plantea que se deje actuar a la Fiscalía y a la Justicia, más aún habida cuenta de que Díaz Verón no se opuso en ningún momento a ser investigado.
