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Muy baja actividad comercial se registró ayer en el microcentro de Ciudad del Este, según reportaron los empresarios de la zona. La mayoría está expectante de la llegada del carnaval, ya que en las fechas previas a dichas fiestas, una importante cantidad de compradores brasileños ingresan a la capital del Alto Paraná para realizar sus compras. En tanto, los trabajadores se quejaron de la falta de agentes de la Policía Municipal de Tránsito.
CIUDAD DEL ESTE.- Escasas ventas se concretaron en la parte céntrica de esta ciudad, conforme aseguraron los trabajadores de la zona. Las avenidas principales del centro estuvieron mayormente vacías. Solamente las primeras horas del día se observó mayor actividad, luego todo permaneció sumamente calmo.
El trabajador de la vía pública, Ángel Cabrera, aseguró que muy pocos brasileños atraviesan el puente de la Amistad desde Foz de Yguazú, y que por ello las ventas se redujeron considerablemente.
“Vendemos algo para salvar al menos nuestros gastos básicos, pero solíamos vender más en esta época del año, porque estamos en vacaciones”, sostuvo Cabrera.
Asimismo, se quejó de la falta de agentes de la Policía Municipal de Tránsito, quienes, según la denuncia de Cabrera, se ausentaron pasado el mediodía sobre la avenida Adrián Jara, donde se registró el tránsito de colectivos de larga distancia que tenían dificultad para girar en algunas pequeñas esquinas.
“Deberían estar los funcionarios para indicar a los colectivos de viajes por qué calles no pueden entrar porque son angostas. En pleno sábado al mediodía no teníamos zorros”, lamentó Cabrera.
ESPERAN EL CARNAVAL
En tanto, la empresaria Natalia Ramírez Chan, aseguró que están expectantes a la llegada del carnaval, dado que las ventas se incrementan durante estas fiestas, ya que muchos eligen aprovechar los días feriados para viajar a la Triple Frontera a realizar compras.
“Anteriormente en el carnaval todo moría, porque los brasileños iban a los grandes festejos en su país, pero actualmente una gran cantidad de personas ya eligen viajar, hacer turismo o compras durante los días de ocio”, explicó Chan.
Señaló que es difícil adelantarse y predecir cómo se comportará el público brasileño este año durante el carnaval, pero aun así, los comerciantes están optimistas en cuanto a las ventas.
Apuntó igualmente que en épocas pasadas, los habitantes del vecino país compraban mucho durante enero, aprovechando las vacaciones de verano, pero este comportamiento cambió drásticamente los últimos años.
