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ASUNCIÓN. Algunos medios publicaron que el cargamento de cigarrillos incautado ayer es de Tabacalera del Este S.A. (Tabesa), algo que fue desmentido por su presidente, José Ortiz, quien aseguró que aunque hayan sido fabricados o producidos por la empresa, no son de su propiedad.

“Además, en las fotos se nota que hay productos de todas las fábricas, así que son varios terceros que tienen sus intereses allí, pero siempre que ocurren estas cosas se trata de pegar a Tabesa, por interesas políticos”, dijo el empresario.

“Nosotros no tenemos mucha información. Se ve que hay depósitos; imagino que es una propiedad privada, y si es así y los productos son nacionales, que pagaron sus impuestos, no sé cuál es el delito. Si están fuera del depósito sería otra la situación. No tenemos por qué estar, porque no somos la institución pertinente”, explicó.

Lamentó que en la prensa, “aproximadamente un proceso dura 5 minutos, y ya se condena a las empresas, personas y demás, antes de que las instituciones actúen; son las que están encargadas de establecer qué incumplimiento hay o cuál es la irregularidad. Pero ninguno de esos productos son de Tabesa; pueden ser producidos por Tabesa pero no son propiedad de Tabesa”.

“Le hicieron entrevista al subsecretario de Tributación; en las fotos se ve que las cajas tienen placas; ese es el instrumento selectivo al consumo, porque vos estás obligado a pegar de una manera tal que cuando se abre la caja se inutiliza la placa. Cada fábrica solicita esa placa a la Subsecretaría de Tributación y es el comprobante o prueba cuando el cigarrillo circula en la vía pública o está a la venta, de que pagó sus impuestos. Por lo que se ve en las fotos, no hay evasión tributaria”, manifestó Ortiz.

Acotó que “siempre es muy atractivo pegarle a Tabesa porque un accionista es político y fue presidente (Horacio Cartes). Hay varias fábricas pero se menciona solo a Tabesa. Hay un ensañamiento hacia la empresa por parte de algunos grupos económicos y de prensa, que hasta podrían estar coordinados con la competencia internacional”.

Ortiz dijo que el trasfondo de todo esto es que se busca que aumente el impuesto al tabaco, que no es bajo, para beneficiar al Brasil que tiene impuestos confiscatorios, pero con eso “se perjudica a las empresas formales y se incentiva a las informales. Se promueven los negocios ilícitos en el país. Las tabacaleras son un sector formal y el mayor aportante de impuestos al fisco. Basta de tanto show”.