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RÍO DE JANEIRO.- La expresidenta brasileña Dilma Rousseff (2011-2016), pretende volver a la primera línea de la política de su país en las elecciones de este domingo con un escaño en el Senado por el estado de Minas Gerais (sureste).
El retorno de Rousseff a un cargo de elección popular “será un acto de Justicia y una reparación a una persona que fue golpeada”, dijo el diputado Paulo Teixeira, del mismo Partido de los Trabajadores (PT) de la exmandataria, en referencia al polémico “impeachment” que la apartó del poder hace más de dos años.
La exjefa de Estado se convirtió en la primera mujer en llegar a la presidencia de Brasil en las elecciones de 2010, mediante la popularidad de su antecesor y padrino político, Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011).
La expresidenta se presenta al Senado por su estado natal, Minas Gerais, aunque hace mucho que no vive allí, algo que sus adversarios usan para atacarla.
En una reciente entrevista, Rousseff se defendió de esas críticas diciendo que tuvo que abandonar su tierra natal debido a la dictadura, y no “para pasear por Río de Janeiro”, en alusión a su eterno rival, Aécio Neves.
Rousseff opta a una plaza como senadora, mientras que Neves, quien ya fue senador, intentará ahora ser elegido como diputado, a pesar de que su popularidad cayó enormemente debido a múltiples acusaciones de corrupción.
