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Más sinsabores que alegría dejó la 17ª fecha del Torneo Apertura, cuando faltan 5 fechas para concluir. El campeonato está a 15 puntos de distancia, que los que siguen en carrera deberán esforzarse por obtener y aguardar que el que lo precede tropiece y caiga. Libertad es el líder del torneo.
ASUNCIÓN.- Libertad lleva las de ganar. Con un partido menos jugado (tiene uno pendiente con Deportivo Capiatá) parece enderezar su rumbo hacia un nuevo campeonato. Por lo menos esa es la impresión que dejó después de derrotar fácilmente y sin mayores esfuerzos a un cada vez más debilitado Sportivo Trinidense. Con 34 puntos, lleva 1 de ventaja a Guaraní, 4 a Olimpia y Sol de América y 6 a Cerro Porteño, con posibilidades de aumentar aún más.
EL JUEGO ATRASADO
El encuentro del jueves venidero entre Libertad y Capiatá será crucial para los que ocupan sitios expectantes. Lo que menos desean es que vuelva a ganar Libertad porque de lograrlo, se ampliaría la diferencia y hasta se diría que cazar al líder se va a convertir en misión casi imposible. Y si bien no definirá el torneo, dejará el camino abierto a los gumarelos.
UN PASO IMPORTANTE
Para Olimpia haber conseguido dos triunfos claros, contundentes, frente a Capiatá (5-1) y Cerro Porteño (2-0) sirvió para alentar aún más la esperanza de llegar al título. Pero la cuestión no pasa solamente por esperar que el puntero tropiece, sino hacer hasta lo imposible para seguir acosándolo con fútbol y con goles que es una manera muy valiosa de meter presión. Porque si se dan las condiciones favorables, deberá aprovechar.
DURO TRASPIÉ
En todos los clásicos se da el presupuesto de una probable derrota. Nadie quiere perder, pero al encarar un compromiso frente al tradicional rival, hay que tener en cuenta también que las cosas pueden darse al revés de lo que se desea.Nadie quiere perder, pero en el fútbol la derrota es una posibilidad concreta. Esta vez le tocó perder a Cerro Porteño. Justo cuando esperaban acortar la distancia que le lleva Libertad. Todavía puede ser campeón, pero…
INTRATABLE INDEPENDIENTE
El equipo de Chito Ayala dio el gran golpe del campeonato. Tumbó a uno de los mejores equipos de la temporada. Un Guaraní que jugaba con solvencia, que se sacaba rivales importantes de encima y que justicieramente había ascendido a lo más alto de la tabla de posiciones. Pero cuando le tocó confirmar ese salto y mantenerse en la cima, fue sorprendido por un equipo que le cortó la racha y le impidió seguir arriba.
DE TUMBO EN TUMBO
Es increíble este Sol de América. Es capaz de noquear el más pintado y de perder por puntos contra otro menos peligroso. Es lo que le pasó en su encuentro ante su vecino Nacional y hasta se puede decir que tuvo suerte y sacar el empate. Estaba para escalar a la cumbre (tendría 32 puntos de haber ganado), pero no pudo ser. Otra vez afloja en las fechas finales y va despidiéndose del título que tanto ambiciona.
EN LA COLA ESTÁ EL VENENO
La tabla de promedios es rigurosa: castiga a los que durante tres torneos consecutivos no supieron hacer las cosas bien. Trinidense va rodando de vuelta a la Intermedia. Tendría que hacer al menos 35 puntos más desde aquí hasta que finalice el torneo Clausura para salvarse. Es casi imposible. Y la lucha entre General Díaz, Rubio Ñu y Nacional es encarnizada. Pocos puntos los separan y muchos quedan por jugar. Pero es casi seguro que uno de los tres acompañe a “Triqui” de regreso a la Intermedia.
