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ASUNCIÓN (Por José María Troche).- Se puede decir que los dioses del fútbol se disfrazaron de paraguayos y le dieron a los 4 equipos participantes de la Copa Sudamericana la posibilidad de recaudar al menos 1.000.000 dólares, si pasan de la primera vuelta. Si miramos el programa que le cayó en suerte a nuestros clubes, convengamos que hoy día ningún rival es fácil, o si no que lo digan los que se cruzaron con el desconocido y aparentemente fácil, Independiente del Valle.
ANTE UN DEBUTANTE
Pero como esto se trata de nombres y pergaminos, y como en esta Copa Sudamericana generalmente aparecen los grandes de cada país cuando hacen alguna campaña mediocre que los deja fuera de la Copa Libertadores, los rivales de nuestros equipos parecen “accesibles”. Es decir que, si no guiamos por la historia y los antecedentes, Cerro Porteño debería liquidar fácil su pleito con el debutante, Fénix uruguayo. Por antecedentes, por historia, por curriculum. Según Gustavo Morínigo “esta es la oportunidad de avanzar en la Copa”. Es posible. Totalmente posible.
BAILAR CON LA MÁS FEA
A Sportivo Luqueño le tocará “bailar con la más fea” como suele decirse porque se cruzó en su camino el club sudamericano con mayor raigambre copera, desde aquella primer Libertadores de 1960: el glorioso Peñarol de tantas glorias, de tantos triunfos y tantas copas. Pero a Peñarol también le tocó la época de las vacas flacas y después de la era dorada de Forlán, Goncalvez, Rocha, Morena, y tantos otros, conoció la llanura de la que hoy empieza a salir. Y ante ese rival Luqueño, como dice Rivera, “tenemos que ser cautos y asegurar el resultado”. Es posible. Totalmente posible.
DE VUELTA A BOLIVIA
Tal como ocurriera en 1979, cuando Sol de América y Olimpia representaron a Paraguay en la Copa Libertadores, a los azules le toca regresar a Bolivia esta vez para enfrentar a Jorge Wilstermann de Cochabamba a un cruce en el que todo parece apuntar a favor del equipo paraguayo. Sol cuenta con un plantel importante y un rendimiento altamente auspicioso. A la inversa del fútbol boliviano, devaluado y fuera del concierto de los grandes. Para Sanguinetti “La altura será nuestro principal enemigo, pero los podemos vencer”. Es posible. Totalmente posible.
PARADA TRASANDINA
Libertad es el equipo paraguayo de mayor presencia en la Copa Sudamericana. 12 de 15 ediciones lo vieron presente y siempre entreverado en los puestos de privilegio. Más de una semifinal lo tuvieron cerca de la gloria, coincidiendo también con los 9 campeonatos ganados desde que comenzó este siglo. El cuadro chileno resucitó en estos últimos años, y suena como férreo opositor de nuestros “gumarelos”. “Tenemos que aprovechar esta ocasión”, dijo “Tiburón” cundo se enteró del rival. Es posible. Totalmente posible.
¿ES POSIBLE?
Claro que sí. Al menos, salvo Peñarol, no hay ningún rival que meta miedo. Y en todos los casos, los rivales dependen de sí mismos. Los partidos son a suerte y verdad. Pero no hay que estar confiados porque donde menos se espera, salta la liebre. Porque en el fútbol, todo es posible. Y hasta los más pintados mordieron el polvo de la derrota, por cantar victoria antes de tiempo.
