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La ministra de la Corte Suprema de Justicia, Gladys Bareiro de Módica, dijo que no se cumplieron con las medidas de seguridad en el Poder Judicial de Ciudad del Este, donde el martes último se registró otro robo de evidencias. Afirmó que el dinero debía depositarse en el Banco de Fomento, mientras que las armas debían trasladarse a la Dirección de Material Bélico (Dimabel). Dicha determinación fue tomada luego del hurto agravado, ocurrido en abril pasado.
CIUDAD DEL ESTE.- La ministra Gladys Bareiro pidió apoyo del pleno para una investigación exhaustiva. Los responsables del Poder Judicial argumentaron que por falta de presupuesto no realizaron las gestiones correspondientes, para salvaguardar las evidencias.
Los autores del hecho punible sustrajeron dinero en efectivo y armas que estaban guardadas en la bóveda de la sede penal. Para la perpetración del ilícito abrieron un boquete en las paredes del local y violentaron la oficina del encargado, Ramón Caballero Martínez.
Éste manifestó que el 3 de junio último, en horas de la tarde se había retirado de su oficina, dejando las puertas aseguradas bajo llave.
Al día siguiente, siendo las 07:15 horas, llegó a su lugar de trabajo, que la puerta del acceso a su despacho fue violentada. Al ingresar, divisó que las cajas de evidencias se encontraban tiradas al piso y una caja fuerte estaba completamente destruida.
Según antecedentes, el 30 de abril pasado, Gladys Bareiro, informó al pleno sobre la desaparición de varias evidencias que estaban guardadas en el almacén del Poder Judicial.
En ese entonces se constató faltante de armas de fuego y aparatos celulares. También una pistola de la marca Glock, color negro, de procedencia austriaca; revólver, calibre 22 milímetros, marca Llanero; un sobre blanco con 7 cartuchos percutidos, calibre 9 milímetros; un sobre de color blanco con cinco cartuchos, cuatro de ellos sin percutir y uno percutido, calibre 22 milímetros.
Igualmente, no se encontraron un aparato celular de la marca Samsung, modelo S4 y un celular de la marca Motorola, modelo XT 890.
Por este caso fueron detenidos Luis Bernardo González, exfuncionario judicial, y Jorge Antonio Duarte Araújo, quien se desempeñaba como guardia de seguridad. El caso es investigado por la fiscal Cinthia Leiva Cardozo.
