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El monseñor de Asunción, Edmundo Valenzuela agradeció a todos los paraguayos por su fe y pidió que sigan rezando para obtener la pronta canonización de María Felicia de Jesús Sacramentado, Chiquitunga. La primera beata paraguaya, ya podrá ser venerada por devotos, tener día festivo con su misa y oficio.
ASUNCIÓN.- “Quiero agradecerles a todos por su fe, por su cariño a la beata María Felicia de Jesús Sacramentado por su presencia entusiasta, generosa y alegre”, expresó Valenzuela.
Sostuvo que con la beatificación de Chiquitunga, se destaca la figura de la mujer paraguaya, que junto con San Roque González de Santa Cruz podrán ser venerados.
El religioso también pidió a los feligreses para que sigan rezando para obtener la pronta canonización de la beata María Felicia.
En otro momento agradeció al papa Francisco por su cariño y su constante recuerdo hacia el país, y los saludos recibidos mediante peregrinos que llegan hasta Roma para participar de la celebración en la Basílica de San Pedro. En ese sentido los más 45.000 fieles que se encontraban el estadio de Cerro Porteño expresaron “gracias Santo Padre”.
En otro momento también agradeció al enviado del papa Francisco al cardenal Ángelo Amato, por su presencia en Paraguay, haciendo hincapié en que el mismo cierra su periodo como prefecto de la Congregación de la Causa de los Santos.
“También agradecemos al Gobierno Nacional por considerar la actividad de interés nacional, agradecemos al señor presidente de la República, Horacio Cartes y a sus ministros, a las autoridades civiles, municipales y policiales, al igual que al intendente Mario Ferreiro y al Club Cerro Porteño, así como a la comisión central de beatificación”, mencionó.
Por otro lado, Valenzuela y todo el público presente destacaron el “extraordinario” retablo elaborado por el artista plástico Koki Ruiz y sus colaboradores con el rostro de la primera beata paraguaya. “El arte paraguayo será reconocido y rescatado más allá de nuestras fronteras”, añadió.
Finalmente exhortó a los presentes a vivir la santidad así como lo vivió María Felicia de Jesús Sacramentado “Chiquitunga”
Por su parte, el Prefecto Ángelo, resaltó que en la acción católica o en el convento carmelita, Chiquitunga “estaba siempre disponible para colaborar, ayudar, para la concordia”. Por su disposición para ayudar a los ancianos, pobres y enfermos, “algunos testigos la comparan con la Madre Teresa de Calcuta”.
“La nueva beata alienta a la juventud paraguaya a permanecer siempre fieles al amor de Jesús y a siempre servir a los más necesitados”, concluyó el cardenal.
