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Fallos de la Corte Suprema de Justicia que no se respetan, un Poder Legislativo devenido en “última instancia judicial”, senadores de facto, “mau”, que no fueron
electos ni proclamados por la única autoridad electoral que es el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), difícilmente no generen problemas en la economía en el corto o mediano plazo. El economista Amílcar Ferreira, ya lo había advertido y dijo que existen antecedentes en el país. Igualmente, en la región, en Brasil, la crisis política hizo desacelerar el crecimiento.
ASUNCIÓN. La economía paraguaya actualmente es una de las más sólidas de la región. Pero esta podría estar en riego debido a la crisis política que pone en jaque la institucionalidad de la República, como ya lo advirtieron expertos como el chileno Patricio Valdés, expresidente del Tribunal de Calificación de Elecciones de Chile.
El Paraguay está a un paso de obtener el grado de inversión de las calificadoras internacionales, pero esto podría también truncarse por los líos que existen con el incumplimiento de los fallos de la máxima instancia judicial o tener un Senado con legisladores que no fueron electos y ni siquiera proclamados por la Justicia Electoral.
Toda esta situación, indefectiblemente tendrá impactos económicos de distinta envergadura y de variada amplitud, aunque éstos aún no puedan ser identificados claramente.
Las agencias calificadoras tienen en cuenta la institucionalidad, donde se incluye el respeto a cada poder del Estado, cosa que no está sucediendo en la República del Paraguay, atendiendo a que en el Senado se niegan a cumplir las decisiones del Poder Judicial.
Nuestro país actualmente tiene una buena imagen internacional, que lo construyó durante varios años con buenas medidas macroeconómicas, seguridad jurídica y crecimientos sectoriales. Todo esto hizo que nuestro país se posicionara en un lugar apropiado y atractivo para las inversiones, donde el reducido riesgo era uno de los principales atractivos. A partir de los últimos eventos políticos es pertinente revisar la conformación y medición del riesgo país.
El ambiente político influye sobre la economía. La inestabilidad en dicho ámbito que existe actualmente en el Paraguay no le hace bien al sector económico, que presenta muy buenos números y es considerado como uno de los más sólidos de la región. Esto es lo que ya había afirmado por el economista, Amílcar Ferreira.
Para el analista debe haber estabilidad y tranquilidad para que haya ambiente para las inversiones, pidió el economista. Éste, recordó que no solamente a las inversiones afecta esta inestabilidad. También al consumo y por ende a la facturación de las empresas.
Hay ejemplos en la región donde claramente la crisis económica llevó a la desaceleración de la economía, como actualmente sucede en el Brasil.
Por ahora, la economía aún no fue contaminada por la crisis política, pero es una cuestión de tiempo para que esto ocurra, si no se supera. Sin duda toda esta situación de incertidumbre pone en riesgo el sector económico.
