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SANTA ROSA DEL AGUARAY. Milciades Velázquez es un sacerdote que imparte los ritos de la iglesia católica y a su vez funge de activo agente del orden, en la localidad de Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro. Es oficial inspector y capellán de la Policía Nacional en esta zona del país. Todos los días viste el uniforme, detiene a personas y hasta realiza allanamientos irregulares, según denunciaron los vecinos y los propios agentes policiales.
Una investigación del Canal GEN muestra cómo actúa el “policura”, quien incluso asegura que está “trabajando bajo la luz de la justicia”. “Acá en Santa Rosa hay muchas cosas… (a los que detiene) se labra acta y se les larga”, justificó el cura.
Según la investigación del citado medio, Velázquez se toma atribuciones que no le corresponden. Él decide qué es delito y qué no; a quién detener y a quién no. Está por encima del comisario de la zona, que no pueden hacer nada.
Pero la peor parte se llevan los pobladores, quienes no pueden defenderse del cura-policía. La Junta Municipal de esta localidad ya remitió una nota a la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), pidiendo explicaciones sobre las atribuciones del hombre que hace de policía y sacerdote; a veces incluso de fiscal.
VÍCTIMA DE TORTURA
Estelvina Garcete, quien trabaja como recolectora de latitas junto a su pareja, dijo que son víctimas constantes del “policura”. Relató que en varias ocasiones fueron hostigados por Velázquez. “Trabajamos día y noche. La última vez nos rodeó en una calle y le dijo (el sacerdote) a su acompañante que le agarre a mi compañero. Le rompió toda la camisa. Salimos de ahí y en la otra cuadra otra vez nos agarraron y nuevamente le zarandearon a mi pareja. Nos acusa de dar pistas a los ladrones para que roben las casas. Ese día le llevaron a mi compañero a la comisaría. Allí le hicieron limpiar todo el lugar y prácticamente le torturaron”, relató la mujer.
“No le considero un sacerdote, porque si le sirve a Dios no debe ser así”, añadió Garcete, quien denunció a Velázquez por coacción grave. “La fiscala y la jueza nos dijeron que él actuó mal. Puso sobre nosotros amenaza de muerte. ‘Si yo no te mato, te voy a mandar matar’, le dijo a mi pareja”, contó la pobladora.
“NO CORRESPONDE SU ACCIONAR”
El “policura” utiliza la infraestructura y los recursos de la institución policial para realizar operativos completamente irregulares. El oficial Carlos Vargas dijo que “a a veces, por mera información, se va uniformado, entra en domicilio ajeno a retirar vehículos, ya sea motocicletas, camionetas, uniformado. A veces viene a llevar personal (policial) sin consentimiento del jefe”.
Reveló que en una ocasión solicitó acompañamiento para allanar un lugar. El procedimiento (ilegal) resultó infructuoso y “de venida ya arreaba a personas inocentes por estar sentadas en las plazas o por estar manejando sin cascos. Los aprehende y los deja en la comisaría. Esto ya hizo en varias ocasiones y con muchísimas personas. Pero la gente tiene miedo de denunciarle, por temor a represalia, porque es como actúa”.
Por su parte, el jefe de la Comisaría 18ª, Rodolfo Ramírez, afirmó que “no corresponde el trabajo que está haciendo dentro de la sociedad. Sale uniformado, tiene arma larga, a veces maneja y hace procedimientos dentro de la jurisdicción. Trae, según él me manifiesta, motocicletas indocumentadas, menores que se encuentran en la plaza, en la vía pública”.
POLICURA: Investigación especial del Canal GEN.
Un sacerdote realiza detenciones y allanamientos en Santa Rosa.📺 12/612HD de Tigo TV, 8 de Copaco, 15 Claro IPTV y 12 Personal
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