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ASUNCIÓN.- El sistema judicial sigue intacto, a pesar de que el nombramiento de Sandra Quiñónez al frente de la Fiscalía sirvió para destrabar la crisis política, según el doctor Jorge Vasconsellos, quien dijo que hay que hacer cambios graduales antes de llegar a la constituyente, porque ésta no soluciona todos los problemas y eso ya lo comprobamos en 1992.
Nuestros responsables políticos o judiciales no tienen interés en una modificación sustancial del sistema de Justicia, fue lo primero que nos dijo, contundente, el conocido jurista.
Cómo hacer, entonces, estos cambios de fondo sin una constituyente, fue la pregunta que le hicimos, a la que respondió que “se pueden hacer cambios graduales y terminar el proceso con una constituyente. La concepción de una constituyente soluciona todos los problemas es equivocada. De hecho, es lo que nos pasó en el 92, cuando apostamos a que la Constitución iba a diseñar un Estado distinto, un sistema de Justicia distinto, pero resulta que por debajo de la Constitución seguían las mismas leyes, las mismas prácticas, la misma mentalidad, las mismas costumbres y, en definitiva, antes que mejorar el sistema de Justicia, se profundizó la ineficiencia, la corrupción, etc.”.
Lo primero que hay que hacer, señaló, es modificar la Ley Orgánica del Ministerio Público, a fin de que los fiscales no puedan ser recusados, ya que, “por poner un ejemplo: a mí no me gusta que fulanito sea el fiscal de la causa, entonces lo recuso y elijo a mi contraparte. No tiene propósito, no tiene motivo. Es sencillamente un instrumento para conseguir el fiscal al gusto de una persona, así, se consiguen 10, 15 recusaciones hasta que se llega a alguien que tenga afinidad”.
