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ASUNCIÓN.- La agenda electoral del Frente Guasu tiene 5 ejes programáticos: educación y problemática de docentes y estudiantes; equidad tributaria; soberanía hidroeléctrica; estado social garante de derecho y reforma agraria. La senadora Esperanza Martínez dijo que en base a esos puntos se definirán alianzas electorales de cara al 2018 con otros sectores de la oposición.
En cuanto al punto de la educación, la legisladora dijo que “no es sostenible que alumnos y educadores cada año tengan que salir a las calles a exigir sus reivindicaciones y cada año se tenga que discutir qué se hace, qué no se hace y por qué no se hace”. Aseguró que se necesita un pacto político sobre la educación, para garantizar la revisión del modelo educativo, el presupuesto sostenido y la inversión a realizarse.
En cuanto a la efectiva equidad tributaria, explicó que lo primero que había que hacer era la revisión del modelo de tributación y la elaboración de una amplia reforma tributaria, asegurando una mayor equidad social.
Dijo que “tenemos que ver qué leyes se van a necesitar para su implementación, también revisar la política de endeudamiento público. No podemos seguir haciendo de manera irresponsable”.
El tercer eje, el de la soberanía hidroeléctrica, se refiere tanto a la Itaipú Binacional como a la Entidad Binacional Yacyretá, tanto en el ámbito económico, administrativo, cultural y territorial. “Nos interesa saber qué pasará con las negociaciones con Macri y Temer en los últimos meses de este gobierno y en los otros cincos años que vienen”, manifestó la senadora.
Agregó que no se pueden repetir las mismas negociaciones anteriores, en las que se entregó soberanía y se crearon los grandes ricos, con la pobreza de la mayoría.
Al hablar del cuarto eje, que trata del estado social garante de derecho, Martínez condicionó su concreción al rechazo absoluto a la posibilidad de que las empresas públicas de servicios básicos pudieran ser privatizadas. Se refirió, además, al desarrollo industrial como política para la generación de empleos y la lucha contra la pobreza, con responsabilidad socioambiental que tengan relación con las normas laborales, la seguridad social y la revisión de las políticas laborales.
En cuanto a la reforma agraria, el último eje, dijo que debe dar apoyo a la agricultura familiar campesina y se debe revisar el modelo de producción, dando apoyo técnico y crediticio. Se refirió además a la soberanía alimenticia y a la necesidad de generar incentivos para modelos de asociaciones y cooperativas campesinas.
