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ASUNCIÓN. El doctor Héctor Castro, director del Programa Ampliado de Inmunizaciones, contó que la situación es muy complicada en este momento ya que no puede dedicarse exclusivamente a la logística y planificación de las vacunaciones, sino otras situaciones como la de las personas inmunizadas de manera irregular, a lo que se suma la escases de las dosis y la poca gente que acude a los vacunatorios.
“Hay muchas situaciones que atender y no necesariamente la logística y planificación, y causa un golpe en el ánimo. Soy también receptor de los jefes PAI y los vacunadores. Y es increíble que por algunas irregularidades muchas personas son golpeadas, y también la población. Es más difícil trabajar para atender a los encamados porque tenemos que regirnos a una estructura absolutamente rígida, muchas veces se presta a la interpretación que existió intención de vacunar a otro tipo de personas”, afirmó en Tempranísimo, por la 970 y GEN.
Negó estar pensando en renunciar porque se siente muy respaldado por el ministro de Salud, Julio Borba, y todo el equipo, aunque reconoció que “hay muchas situaciones que desaniman y desgastan, como estas cuestiones irregulares, que nosotros somos el blanco de críticas y muchas veces de manera muy injusta; duele mucho y al entorno que uno tiene. Al final del camino las personas van a saber quién cumplió y quién fue honesto”.
Reconoció que hace falta un mensaje comunicacional fuerte para alentar a la gente a acudir a los vacunatorios; “En ese sentido tenemos mucha gente preparada que puede ayudarnos. También tenemos que atender las cuestiones irregulares que al presentarse deben ocupar gran parte del tiempo para esclarecer. Queda poco tiempo para el mensaje efectivo. Al llegar las vacunas como que tenemos un relajo. La gente actúa por la sensación del peligro inminente”.
“Estamos vacunando adultos, que es diferente que vacunar a niños porque los padres son más responsables por sus hijos que su propia salud. Estamos en una pandemia, que acentúa los rasgos buenos y malos. Esatmos en una lucha por las vacunas. En las redes sociales uno puede acceder a la información, y muchas de ellas falsas. Repetimos opiniones ajenas sin saber si es cierto. Nos dolemos por el dolor ajeno. Hablar por las personas que piensan distinto es el desafío permanente. Los que emiten opinión contra la vacuna pueden causar mucho daño y pueden causar incluso la muerte de muchos”, manifestó.
Castro afirmó que en estos días se evaluará la posibilidad de bajar el rango de edad a 70 años, principalmente por la poca cantidad de gente de 75 y más que está acudiendo a los vacunatorios, pero para ello se tiene que tener en cuenta con cuántas dosis se cuenta y las personas que deben recibir la segunda dosis de las vacunas ya aplicadas.
