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ASUNCIÓN.- El presidente Mario Abdo Benítez, vencido por Horacio Cartes en las internas de la ANR del domingo último, dijo que “está muy satisfecho” con el resultado de las elecciones, aunque el objetivo era ganar. Culpó al tiempo por la derrota y afirmó que si la campaña se prolongaba un poco más, “tal vez” hasta podían “acercarse más”. Manifestó que después de las fiestas de fin de año y un análisis profundo de todo el procesal electoral, definirá cuál será el rol que cumplirá en la campaña por la Lista 1, con miras a las elecciones generales del 2023.
“En esta primera etapa podemos decir que estamos muy satisfechos. Obviamente nuestro objetivo era ganar y jugamos a ganar estas elecciones, pero vivimos algunas coyunturas complejas. Nosotros empezamos con casi 65 a 3, que era la intención de votos cuando comenzamos con nuestro primer candidato (Hugo Velázquez). Después pasó lo que pasó (renuncia de Velázquez) y empezamos a crecer. Comenzamos con más de 35 puntos de diferencia y tuvimos un crecimiento importante”, manifestó. Agregó que “la campaña se basó en dos etapas: la primera etapa era consolidar el voto duro de nuestro movimiento y segundo permitirle a nuestro candidato que crezca solo”.
Afirmó que “los último 100 días ya no hice campaña, porque todos los votos duros del movimiento ya se fueron al candidato y después le dimos toda la fuerza, la visibilidad y el protagonismo de la campaña a nuestro candidato a presidente. Esa luego fue la estrategia de campaña. Llegamos a una diferencia del 7 % (a favor de Santiago Peña”.
Mario Abdo consideró que si la campaña se extendía más, podían acercarse más. “Creo que si teníamos más tiempo podíamos estar más cerca, porque el crecimiento que era sostenible. Pero en poco más de 100 días de campaña no alcanzamos el crecimiento necesario, pero estamos conforme en el sentido de que respondió el equipo, respondió el pueblo”, refirió el presidente.
Aunque admitió que tuvo una derrota contundente frente a Horacio Cartes, electo presidente de la Junta de Gobierno de la ANR, argumentó que hacía más de 100 días que no hacía campaña electoral. “Yo como candidato del Partido Colorado, por más de que tuve una derrota contundente, alzamos alrededor de 470 mil votos y pasaron como 120 días que no hacía campaña”, señaló.
“Mi candidatura se decidió por el equipo y en aquel momento considerábamos útil para fortalecer la precandidatura de nuestro vicepresidente y cuando hubo el cambio ya nos distanciamos de la campaña porque consideramos que el desgaste de la figura presidencial podía afectar a nuestro candidato. Nos separamos de la campaña y le dimos toda la fuerza (a Wiens). Como hombre de equipo hicimos un enorme sacrificio para que toda la fuerza y el protagonismo de la campaña vaya sobre Arnoldo Wiens y Juan Manuel Brunetti (dupla oficialista que perdió contra Peña-Alliana)”, indicó.
No obstante, expresó: “Como decía el doctor (Luis María) Argaña ‘ya no hay que llorar sobre la leche derramada’. Esta ya es una etapa que culminó para nosotros, una nueva experiencia en un proceso electoral.
Al ser consultado sobre si apoyará la candidatura de Santiago Peña, lanzó una respuesta ambigua: “vamos a trabajar por el Partido Colorado y vamos a ver qué rol va a cumplir cada uno de los autores. El presidente de la República va a evaluar qué rol va a cumplir y cada uno de los integrantes también hará lo mismo para la próxima campaña de la Lista 1, pero vamos a hacerlo después de la fiesta. Vamos a hacer un análisis profundo de todo el proceso electoral, vamos a hablar con nuestros amigos. No estamos impacientes ni apurados por nada. Vamos a hacer todo respetando los protocolos y el ritual del Partido Colorado, pero sí vamos a acompañar y en términos personales principalmente voy a estar del lado de quienes yo confío, de quienes me representan”.
