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ASUNCIÓN.- El Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) entregó 500 títulos de propiedades a beneficiarios de la reforma agraria. El acto encabezó el presidente de la Republica, Mario Abdo Benítez, quien aprovechó la ocasión para brindar su apoyo al titular del Indert, Horacio Manuel Torres, salpicado por un caso de supuesto pedido de coima dentro de la institución, además de llamar al diálogo a los labriegos. Cuestionó el método de las ocupaciones y a los “líderes que lucran con el sufrimiento del pueblo”.
“Haremos el mayor esfuerzo para seguir dignificando a nuestra gente del campo, esta entrega de 500 títulos de propiedad es un primer gran paso. Estamos abiertos para escuchar las necesidades y trabajar juntos por el desarrollo de nuestro país”, manifestó el jefe de Estado.
Agregó que le felicita al presidente del Indert, y “te doy todo el apoyo para sanear la institución si hay que sanear”, enfatizó Abdo Benítez.
Asimismo, en parte de su discurso, el presidente de la República le dio el gran respaldo político a Horacio Torres, un empresario amigo suyo a quien nombró al frente del Indert tras haber asumido en agosto pasado.
Vale recordar que Torres está salpicado por un supuesto pedido de coima de US$ 50.000, hecho por Sergio Cáceres, director de Gabinete del Indert, a un funcionario llamado José Da Silva, asesor jurídico del ente, para evitar que sea puesto a disposición de Recursos Humanos dentro del Indert.
El intermediario fue Alfredo Damián Morínigo Fretez, un político colorado del distrito de Azote’y (Concepción). Supuestamente, Cáceres iba a repartirse la coima con el presidente del Indert, Horacio Torres. La investigación está en manos del fiscal de Delitos Económicos, Rodrigo Estigarribia.
Por otra parte, también Abdo Benítez fustigó a los “líderes campesinos que lucran con el sufrimiento del pueblo”, en referencia a quienes instan a las invasiones de tierra en el campo. “Quien invade tierras y cree que es ese el camino se equivoca. Que vengan a hablar con el presidente, con el presidente del Indert, con el ministro de Agricultura y cambiemos el modelo del enfrentamiento por el modelo de diálogo”, enfatizó el jefe de Estado.
Finalmente, dijo que lamenta que no haya habido una política sustentable para la reforma agraria y añadió que el Paraguay tiene muchas tierras fértiles para que los campesinos sean beneficiados. “Estamos abiertos para escuchar y trabajar juntos. Ya conocemos la historia de los enfrentamientos del pasado. Esto va a llevar su tiempo. No vamos a poder solucionar todos los problemas de la noche a la mañana, pero hoy tienen un gobierno que les escucha, que dialoga, que está comprometido”, concluyó.
