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PEDRO JUAN CABALLERO. El gobernador de Amambay, Ronald Acevedo, volvió a cargar con todo contra el gobierno de Mario Abdo Benítez, tras el asesinato de su hija de 21 años. “Acá (Amambay) los criminales están dando combustible a los policías”, manifestó.

“Cuando Euclides (Acevedo) fue ministro del Interior me fui a pedirle 3 o 4 patrulleras. La respuesta que recibí fue que necesitaban 700 patrulleras a nivel nacional. ¿Qué solución vamos a tener así”, se preguntó Acevedo. Fue durante una manifestación pacífica que realizaron en Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay.

“Es poner un escarabajo con un Mercedes Benz a que jueguen carrera; ellos tienen todo. La policía no quiere actuar acá porque tiene miedo. Tal vez tengan voluntad, pero esa gente está con todo. No sé qué voy a hacer con mis hijas, ellas tienen que salir, ir al colegio o una facultad. No podés prohibir que salgan, ellas quieren ir a un quince años y tengo miedo por ellas”, manifestó.

Sobre el gobierno, dijo que “desde ayer se movieron, desde que lancé un grito al aire y siempre es así. Esto es grande y si no se toma en serio, va a seguir ocurriendo. Esta gente (narcotraficantes) está tomando territorio, ahora ya están entrando tierra adentro y tiende a empeorar. Están muriendo inocentes”.

Refirió que “hace poco tiempo empezó esto de meter ráfagas. Mueren inocentes, tal vez estaban en lugares equivocados con personas equivocadas. Mi hija es una víctima inocente. Ella estaba con sus amigas en un cumpleaños. Tal vez estaba con la persona equivocada, pero ella era joven, qué va a saber que un joven de 29 años iba a estar en el crimen organizado”.

Sostuvo que en Brasil los órganos de seguridad están haciendo un buen trabajo, por lo que los delincuentes vienen a instalarse en nuestro país y reclutan a los paraguayos. “Los jóvenes agarran como un trabajo, venden marihuana a Brasil, es una estructura muy grande que genera dinero fácil”.

Puntualizó que “la zona siempre estuvo así. El ministro del Interior (Arnaldo Giuzzio) en sus tiempos de fiscal, sabía cómo estaba la situación acá. Cuando eso ya había sicariato pero no así. Siempre salimos en lo mismo, en que no hay recursos necesarios para combatir esto. Pero esto no puede seguir así; o dejamos el camino libre para que seamos una Sinaloa. Justamente hice un careo entre el jefe policial y el viceministro, que ayer estuvo en mi casa. Se animó el jefe policial y le dijo que necesitan 20 patrulleras”.