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ASUNCIÓN. El Ministerio de Salud Pública recomienda clorar las piscinas para impedir la reproducción de mosquitos, teniendo en cuenta que cualquier recipiente con agua puede convertirse en un criadero del dengue y otras arbovirosis.

En esta temporada de mucho calor, instalar la piscina o el pelopincho es una de las opciones de una gran mayoría para refrescarse y hacerle frente a los embates del calor.

“Las piscinas que tienen cloro no son viables para la reproducción y cría de los mosquitos”, explica el director técnico del Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (Senepa), Edgar Sanabria.

Otra de las recomendaciones claves para impedir la proliferación del virus es mantener tapados herméticamente, tanques, tambores, cubetas y cualquier recipiente que contenga agua que va ser utilizada.

Se recuerda igualmente, cambiar a diario el agua del bebedero de los animales, previa higiene con cepillo, agua y jabón, a los efectos de eliminar posibles huevos que hayan quedado adheridos en las paredes del recipiente.

Destinar envases y objetos en desuso que puedan acumular agua (tapitas, botellas, envases) y cuidar que no se acumule basura en el interior de los registros de manera que el agua esté drenada.

Dengue: cada ciudadano es responsable de eliminar criaderos

El director General de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, lamentó la indiferencia reinante y recuerda que la eliminación de criaderos es responsabilidad de cada ciudadano y no del Ministerio de Salud.

“Ojalá que no tengamos que esperar a que se muera alguien del barrio o algún familiar para mantener limpias nuestras casas, libres de criaderos”, declaró el galeno y alegó que la eliminación de criaderos no solo debe realizarse en periodos de epidemia, sino debe ser una acción periódica, de cada día, en todas las estaciones del año.

“Como Ministerio de Salud no tenemos que estar informando sobre la cantidad de criaderos eliminados. Le estamos acostumbrando a la ciudadanía que somos nosotros –Ministerio de Salud – quienes debemos hacer la limpieza de las casas”, señala.

El médico lamenta la indiferencia de la ciudadanía frente a la problemática del dengue. Reveló que cuando las brigadas del Senepa realizan recorridos para verificar los barrios, en ocasiones, las familias quedan sentadas tomando tereré, mientras señalan al senepero donde tienen sus criaderos instalados.

Mencionó que, en una de las tantas intervenciones, el funcionario tuvo que desechar uno a uno el agua acumulada de botellas y recipientes de una vivienda, mientras que los dueños de casa miraban. “Hacemos porque no queda de otra. Es muy triste llegar a eso. La gente ya ni tiene vergüenza”, revela. (Con información de Agencia IP)