BERLIN.- Las autoridades alemanas están alarmadas por el resurgimiento del antisemitismo, 73 años después del fin del Holocausto, en un contexto de crecimiento de la extrema derecha y de la llegada de miles de refugiados provenientes de países enemigos de Israel.
“Es inconcebible y constituye una vergüenza ver que ningún establecimiento judío pueda existir sin protección policial”, declaró la canciller Angela Merkel, al conmemorar el 73 aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz en el parlamento este miércoles.
“El odio es un veneno y al final te acabas envenenando a ti mismo”, declaró una superviviente del Holocausto, Anita Lasker-Wallfisch, en su discurso ante los parlamentarios. El antisemitismo es un “virus, aparentemente incurable”, criticó.
Angela Merkel, primer canciller alemán en pronunciar un discurso en la Knesset, el parlamento israelí, hace diez años, se comprometió a crear un puesto de comisionado para el antisemitismo en el próximo gobierno, que espera formar en marzo.
Merkel lanzó esa idea después de la quema en Berlín de banderas israelíes durante una manifestación de protesta contra la decisión de Estados Unidos de reconocer Jerusalén como capital de Israel.