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ASUNCIÓN.- Aunque la misión de la Secretaría de la Defensa del Consumidor y el Usuario (Sedeco) dice que es la de precautelar “los Derechos de LAS PERSONAS CONSUMIDORAS Y USUARIOS, promoviendo la formalización del mercado, el consumo sostenible, soluciones innovadoras con alta participación ciudadana por medio delineamientos e instrumentos que impulsen la igualdad y la seguridad jurídica en las relaciones de consumo”, según su página web, lo cierto es que las amas de casa están totalmente desprotegidas ante el aumento permanente e indiscriminado de los precios de la canasta familiar.
Lo único que hace la Sedeco es tomar muestras semanales en los centros comerciales para tener un listado de precios de los productos básicos. De acuerdo al informe de prensa de la entidad, en la semana del 7 al 11 de marzo, fueron visitados 10 supermercados y analizados los precios de 60 productos de la canasta básica familiar.
A partir de esta información, la secretaría solamente hace recomendaciones a los usuarios, a pesar de constatar el permanente aumento de los productos. Sin embargo, ni siquiera intenta plantear sugerencias al sector comercial, productivo u oficial que puedan llevar a frenar la escalada de precios y obtener algún beneficio para la ciudadanía.
Al final de la publicación, solamente plantea una recomendación que, de acuerdo a los hechos, no sirve para nada: “La SEDECO insta a los proveedores a mantener precios razonables, reduciendo al mínimo el margen de ganancias en esta Canasta Básica Familiar, considerando la situación sanitaria por la que estamos atravesando, hecho que requiere un compromiso de todos, otorgando la posibilidad de compra a consumidores reduciendo así el impacto en la economía familiar”.
