ASUNCIÓN.- Lo acontecido en el vestuario de los árbitros, después del encuentro entre Sportivo Luqueño y Olimpia, sigue generando polémica. En un confuso episodio (que anoche debía ser tratado por el Tribunal Disciplinario de la APF) se topetaron en el camarín de los jueces el presidente del Sportivo Luqueño, Gustavo Benítez, y el trío arbitral. Hubo un forcejeo entre el presidente y el asistente, Milciades Saldívar”, hecho denunciado por el árbitro y que consta en el acta del partido.
Benítez dice que Saldívar lo empujó con su banderín y que por eso le encaró y también lo empujó. Saldívar dice exactamente lo contrario. Pero como hay pruebas grabadas por la TV dueña de los derechos, ese documento servirá para dilucidar la cuestión y contar con algo de lo que pueda atenerse el tribunal.
Pero no todo terminó allí. Ayer, al mediodía, el Círculo Paraguayo de Árbitros de Fútbol emitió un comunicado repudiando los hechos y especialmente la conducta antideportiva del presidente de los luqueños. El documento expresa, entre otras cosas que “repudia las declaraciones del presidente del Sportivo Luqueño, así como su actuar contra el equipo arbitral, al finalizar el partido”.
El gremio de jueces además anuncia que no tolerará cualquier comportamiento similar de directivos u otros protagonistas y “no escatimará esfuerzos para llevar adelante acciones pertinentes en defensa de sus asociados”.