ADN Digital
Artículos relacionados
El Banco Central del Paraguay (BCP) bajó en un 0,8% la proyección del Producto Interno Bruto (PIB) para este año. Con el ajuste realizado, el crecimiento que inicialmente se estimaba en un 4%, ahora baja 3,2%. Esto se debe a la desaceleración de la economía local. Los sectores donde más se siente el bajón son la de manufactura o la producción industrial, la agricultura, comercio y en la construcción civil, de acuerdo el informe de los técnicos de la banca matriz. El único sector donde hay un alza es la ganadería.
ASUNCIÓN.- Una combinación de factores como la crisis económica en la región, el bajón en la producción y el consumo hará que Paraguay tenga un menor crecimiento económico este año. Esto de acuerdo a las últimas previsiones del BCP.
El economista Amílcar Ferreira señaló que esta situación podría obligar a hacer ciertos “ajustes” en el presupuesto, o sea ajustarse los cinturones
El último informe sobre la Política Monetaria, el BCP señala que el crecimiento económico estimado para el 2019 será de solo el 3,2% teniendo en cuenta el contexto actual. En principio, la estimación era del 4,0%, pero este porcentaje debió ser nuevamente corregido. Bajo un 0,8%.
El documento menciona primero el complicado panorama regional y luego señala que “en el plano local ha persistido el moderado ritmo de crecimiento en los últimos meses del 2018, en parte, explicado por los choques externos adversos y factores internos de oferta. Así, el PIB registró una expansión de 1,2% en el cuarto trimestre, impulsada fundamentalmente por el sector servicios y, en menor medida, por electricidad y agua y agricultura. Por su parte, las manufacturas, la construcción y la ganadería mostraron caídas”.
Agrega que “el crecimiento estimado para el 2019 fue corregido de 4,0% a 3,2%, teniendo en cuenta el comportamiento reciente y las perspectivas de los distintos sectores económicos. Por el lado de la oferta, los ajustes más importantes se dieron en agricultura y en la producción de electricidad, sectores que han sido afectados por factores climáticos (sequía), mientras que las manufacturas, el comercio y los otros servicios también fueron revisados a la baja, pero en menor magnitud. No obstante, se ajustó al alza los pronósticos de ganadería, construcción y gobierno general”
En relación a este escenario, el analista económico Amílcar Ferreira dijo que hoy día existe una desaceleración en nuestro país a raíz de diversos factores y, en consecuencia, la economía este año tendrá un menor crecimiento.
Todo esto se debe a una combinación de factores, según refirió. Por un lado, se encuentra la situación regional con un proceso de devaluación de monedas que inició el año pasado y que afecta especialmente a Argentina, además de recortes en la previsión de crecimiento, sobre todo para Brasil. Por otro lado, están las consecuencias del cambio climático que harán que este año la producción de soja sea menor y, por ende, el ingreso de divisas a nuestro país se reduzca.
Ferreira aclaró que en el contexto actual se debe distinguir la diferencia entre una recesión y una desaceleración. En el caso de una recesión, se registran tasas de crecimiento negativo, mientras que en una desaceleración se registra un crecimiento con una tasa inferior, lo cual es lo que justamente ahora le está sucediendo a Paraguay.
El mismo indicó que, teniendo en cuenta estas previsiones, seguramente será necesario “ajustar los presupuestos hacia abajo”, de tal manera a incorporar este nuevo escenario a las proyecciones previstas para lo que resta del año.
Otro de los factores que mencionó el experto es la desaceleración de la inversión pública en años electorales, hecho que se viene registrando desde hace varias elecciones (incluyendo la más reciente del 2018).
SE ESPERA MEJORÍAS EN EL SEGUNDO SEMESTRE
Ante el panorama nada alentador para la economía paraguaya, y los números negativos del primer trimestre, se espera que en el segundo semestre haya mejorías. Esto es lo que vaticina el analista económico, Amílcar Ferreira.
El economista señaló que hay variables que se presentaron en los últimos meses del 2018 y que han tenido efectos en el 2019, especialmente en el escenario regional. Por un lado, el empeoramiento en la Argentina y la muy lenta recuperación en el Brasil.
“Esto es debido a una combinación, por un lado de la situación regional hay un proceso de devaluación importante de monedas que empezó el año pasado y que sigue en el caso de Argentina con más fuerza a fin de año”, explicó Amílcar haciendo hincapié al caso de Brasil.
“También hay recortes en la previsión de crecimiento de Brasil que si bien está creciendo, finalmente será a un ritmo menor. A eso se suma el efecto climático del año pasado de la soja, que va hacer este año la producción sea menor, y el ingreso de divisas se vea afectado. Todo eso hace que se tenga un menor crecimiento”, admitió el profesional.
Sobre las perspectivas para el segundo semestre de este año, dijo que en gran medida va a depender de la ejecución presupuestaria del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
Sostuvo que el último año de una gestión de gobierno y del traspaso a otra administración, como ocurrió en el año electoral del 2018, casi siempre la inversión pública baja y hay una desaceleración a nivel público. “Los que están de salida disminuyen el nivel de ejecución y eso hace que sea un año perdido”, recalcó.
