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BRASILIA. El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que el miércoles dio positivo en la prueba del COVID-19 y deberá pasar dos semanas en cuarentena, ha vuelto a sembrar la polémica al asegurar que llevar mascarillas es “cosa de maricas”, unas vergonzosas declaraciones que ha provocado un aluvión de críticas en las redes sociales.
Según el relato de muchas personas que han estado en contacto con Bolsonaro, el presidente no usa mascarilla, siempre saluda a la gente con un apretón de manos y se ha burlado de las personas que usan la mascarilla con el comentario “es cosa de gays”, según las publicaciones de Folha de S.Paulo.
No es la primera vez que el líder de la ultraderecha brasileña ataca a las personas LGTBI, ya que hace unos meses llegó a asegurar que prefería tener un hijo muerto antes que homosexual, al mismo tiempo que se declaró “homófobo” y estar orgulloso de esto.
Bolsonaro ha sido desde el inicio de la pandemia uno de los mandatarios más escépticos sobre la gravedad del coronavirus, llegando a despreciar en multitud de ocasiones el uso de las mascarillas entre los brasileños y tachando al COVID de “gripecita”, a pesar de que ya ha contagiado a 1.759.103 de brasileños y ha matado la vida de casi 70.000.
De hecho, el presidente brasileño anunció que había contraído el virus ante los periodistas sin mascarilla, provocando que la Asociación Brasileña de Prensa le demande por quitarse la mascarilla y poner en riesgo a los periodistas que lo entrevistaron.
En un comunicado, la ABI ha acusado a Bolsonaro de actuar de forma “peligrosa” y “criminal” al recibir a los periodistas que “considera afines a sus ideas políticas” para la realización de una entrevista en al que “vulneró las recomendaciones de los médicos y saltándose el confinamiento”
Brasil, el segundo país más afectado del mundo por el nuevo coronavirus por detrás de Estados Unidos.
