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ASUNCIÓN. En el Hospital del Trauma, los números son claros en cuanto al daño que producen la explosión de petardos que causan heridas a niños, jóvenes y adultos. El doctor Jesús Marín, médico cirujano del ente, señaló que las lesiones no solo ocasionan heridas graves (e implicancias de por vida) a muchas personas, principalmente a niños, sino que también representan grandes erogaciones de dinero al contribuyente.

“Un traumatismo leve en la mano, cuesta al Estado aproximadamente 30 millones de guaraníes, si es más grave, puede llegar hasta 100 millones, ¿Quién paga? nosotros”, respondió el doctor Marín al ser abordado por la “epidemia” que se verifica principalmente a finales de año.

El profesional puntualizó que las estadísticas son muy claras al respecto del problema de petardos que hieren a la gente. Remarcó que en el año 1990 la proporción de atendidos por ese drama era de apenas 16, que en el 2000 el promedio era de 30, y que a esta altura los niveles llegan a 1.900, en total.

Dijo que la manipulación de explosivos comienza habitualmente en el mes de octubre, que va luego en un crecimiento rápido hasta llegar a su pico en todo el mes de diciembre.

“Desde el punto de vista médico, no existe artefacto pirotécnico que no esté exento de hacer daño o causar lesiones. Al comprar un artefacto pirotécnico, estamos comprando el daño a nuestros hijos”, disparó el doctor Marín.