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ASUNCIÓN. Aunque algunos legisladores pretenden rasgarse las vestiduras ante la idea siquiera de que el Senado piense en devolver la terna de candidatos para la Corte Suprema de Justicia al Consejo de la Magistratura, esto ya ha ocurrido anteriormente y los conflictos entre ambas instancias han sido frecuentes.

Casi siempre hay descontento ante los criterios tenidos en cuenta por el consejo para elegir a los ternados, aunque no siempre se llega a situaciones extremas, las que, sin embargo, sí ocurrieron algunas veces. Así que en este momento no es extraño que nuevamente se hable de que algunos senadores analizan la posibilidad de devolver la terna actual, ante sospechas de que el procedimiento para su elección no fue ni claro ni constitucional.

Hay algunas situaciones que habrían sentado precedente, aunque la más clara fue la dada en el 2015, cuando el entonces presidente, Horacio Cartes, rechazó al candidato electo por el Senado, Linneo Ynsfrán Saldívar, en uno de los momentos más duros en el enfrentamiento entre el jefe de Estado y el Senado, en donde la disidencia colorada (ahora gobierno) y la oposición tenían mayoría y mantenían una dura guerra en contra del gobierno.

Ante esa situación, lo que hizo el Senado fue devolver la terna al CM y se inició el debate entre si bastaba con agregar un nombre que reemplazara el de Ynsfrán Saldívar, o debía reiniciarse todo el proceso, armando una nueva terna. El consejo decidió hacer lo primero, y sencillamente completó la terna con Eugenio Jiménez, sentando precedente sobre el tema.

Un precedente anterior se dio en 1995, cuando el Senado decidió que la terna enviada por el consejo no era vinculante. En esa ocasión, debían elegir a los 9 ministros de la Corte, de 9 ternas remitidas. Al ver que había ternas que no tenían ningún candidato potable, y otras que tenían más de 1, decidieron disolver las mismas y, sencillamente, elegir a los nuevos ministros de un listado de 27 nombres.

Claro que en este caso, si es que prospera la idea de rechazar la terna completa, el consejo tendrá que conformar una nueva, con nombres diferentes. El colegiado deberá tratar mañana, durante su sesión ordinaria, un pedido de informes aprobado por el Senado, en donde se les pide aclaración sobre el proceso de selección, y deberá justificar su decisión de que la sesión hubiera sido secreta, cuando que el reglamento del organismo y la Ley de Transparencia, exigen que sea pública.