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ASUNCIÓN. El presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Pedro Galli, expresó su preocupación ante la noticia de que una mayoría de 70 contra 20 legisladores en el Senado de Estados Unidos haya aprobado una medida que prácticamente prohíbe la importación de carne desde Paraguay. Dijo que “todo indica que podemos quedar fuera del mercado”. Consideró el hecho como una “muestra de desprecio”.
Esta decisión, que aún debe pasar por la Cámara de Representantes, sorprendió a los ganaderos del país, quienes habían trabajado arduamente durante años para obtener la autorización de exportación a Estados Unidos, según manifestó.
Galli destacó que el acceso al mercado estadounidense no solo representaba un negocio en términos de volúmenes, sino también una oportunidad de mejorar la reputación de la cadena cárnica paraguaya y acceder a nichos de mercado que pagan mejor. Sin embargo, esta nueva medida supone un revés significativo para el sector, que ya enfrenta dificultades debido a la situación actual del mercado internacional.
El presidente de la ARP señaló que la decisión del Senado de Estados Unidos llega en un momento complicado para la ganadería paraguaya, que experimentó una migración hacia la agricultura debido a la falta de rentabilidad en la producción de carne. A pesar de los esfuerzos por diversificar los mercados y obtener mejores precios, la situación se complica aún más con esta noticia inesperada.
La aprobación para exportar carne a Estados Unidos fue el resultado de años de trabajo conjunto entre el sector público y privado en Paraguay, que realizó ajustes para cumplir con los estándares exigidos por el mercado estadounidense, refirió. Sin embargo, esta medida legislativa pone en riesgo los esfuerzos realizados y deja en incertidumbre el futuro de la ganadería en el país.
“Para mí es una muestra de desprecio más bien que no sé cómo pondrán esto en un lenguaje diplomático, porque pasamos todas las auditorías del servicio sanitario de los Estados Unidos que es muy severo. Tardamos 3 años en eso, más informes, se tomaron su tiempo, hicieron una consulta pública larga más el análisis de esto”, expresó el gremialista.
Galli advirtió sobre la necesidad de buscar mercados alternativos de alta gama que puedan compensar la pérdida del acceso a Estados Unidos y reflejar mejores precios en toda la cadena productiva, desde los productores hasta los exportadores. La esperanza de acceder a mercados como Japón y países del sudeste asiático se ve ahora amenazada por esta decisión inesperada del Senado estadounidense, lo que plantea nuevos desafíos para el sector ganadero paraguayo.
