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CIUDAD DEL ESTE. En la peor crisis de su historia, Ciudad del Este se halla completamente a la deriva, con las puertas de la Municipalidad cerradas, como consecuencia de que el intendente, Miguel Prieto, dio positivo al COVID-19, este sábado, después de hacer campaña contra todas las medidas de prevención. Como si fuera poco, en las calles de la capital del décimo departamento, los ciudadanos cierran calles y a los gritos reclaman que pasan hambre.

El que se presentó como opción de cambio y como tal ganó las elecciones municipales, resultó ser un embustero más. Miguel Prieto suma cuestionamientos e incluso está denunciado en el Ministerio Público por lesión de confianza y otros hechos punibles, aunque aparentemente la Fiscalía decidió encajonar los casos, pese a que los fiscales, encabezados por Manuel Rojas, realizaron sendos allanamientos, cuyos resultados se desconocen pese a que transcurrieron varios meses.

Hace algunos días, el intendente sorprendió a todo el país al emular al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, al decir que “no cree en el cuento del coronavirus”. Cuando realizó estas declaraciones a un medio de comunicación, estaba sin mascarillas, lo que incluso fue motivo de reclamo de una ciudadana que pasaba por el lugar.

Es más, desde el inicio de la pandemia, aun con restricciones, él se paseaba por la casa de sus amigos, incluyendo un periodista, violando la ley de emergencia sanitaria. El Ministerio Público, donde aparentemente tiene muchos fans, simuló el inicio de una investigación al respecto, pero tampoco prosperó.

Mientras todo esto ocurre y el jefe comunal “facebookero” se pasa discutiendo, utilizando hasta palabras soeces, en las redes sociales con quienes le cuestionan (con respaldo de hurreros, la mayoría con perfiles falsos), la ciudad arde y está a la deriva.

El sector comercial, principal fuente económica de CDE, ya ni da pataleos; está muerto. Decenas de personas salen a diario a las calles a manifestarse y pedir alimentos porque, aseguran, ya están pasando hambre. Se trata de la peor crisis de la historia de la capital del décimo departamento.

Para empeorar esta situación, la Municipalidad cierra sus puertas por 14 días, debido a la irresponsabilidad criminal de Prieto que, según sus propios funcionarios, se pasa de fiesta en fiesta, y ahora dio positivo al Covid.

Muchos tuvieron contactos con él en estos días, por lo que no solamente la institución está afectada por el cierre, sino que también el intendente pudo haber contagiado a numerosas personas, que a su vez transmitieron a sus familiares, causando una cadena de contagios.

Nuestra postura no es culpar a la persona que adquiere el virus habiéndose cuidado, pero en este caso, la responsabilidad absoluta y –reiteramos- hasta criminal, es del intendente, el principal negacionista de la pandemia en esta parte del país, por lo que fue “bautizado” como el “Bolsonarito esteño”.