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CIUDAD DEL ESTE.- Los comerciantes de la capital del Alto Paraná indicaron que ya esperaban este “golpe” de parte del gobierno brasileño, atendiendo a que había una leve recuperación del comercio esteño. Indicaron que desde la semana pasada aumentó la afluencia de los sacoleiros, y esto rápidamente fue detectado por los organismos de fiscalización que decidieron retomar los operativos cerrojos en la frontera con el Paraguay.
El cuestionamiento no es contra los procedimientos y sí la forma en que lo hacen, explicaron los comerciantes quienes indicaron que los brasileños pueden hacer todo tipo de fiscalización dentro de su territorio. Lamentaron la ausencia de las autoridades paraguayas de todos los niveles.
Señalaron que si el objetivo es realmente combatir el tráfico de drogas y armas, además de otras actividades ilegales, ellos saben cómo hacer para reprimirlos. Pero los organismos de seguridad y fiscalización del Brasil realizan pomposos operativos en los lugares más visibles, y por donde no pasan las drogas y armas. El grueso de cargas ilegales va por otros caminos que ellos saben bien, indicaron.
El puesto más grande de control está en la principal vía de acceso y salida de Foz de Yguazú, que es la BR 277. Por el lugar deben pasar tanto los sacoleiros como los turistas, quienes al ver el despliegue de militares y policías, se asustan, y ya no quieren comprar nada por temor a tener problemas al dejar la zona fronteriza.
Sin duda el nuevo operativo denominado “Muralla”, que se inició ayer, tendrá un fuerte impacto sobre el comercio esteño que actualmente pasa por una de las peores crisis de toda su historia.
