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ASUNCIÓN. El abogado y exdiputado Luis Villamayor afirmó que el inminente desabastecimiento que argumentan los directivos y el sindicato de Petropar para solicitar una ampliación presupuestaria de US$ 260 millones, es un cuento. Mencionó que hay intenciones ocultas en el pedido, como por ejemplo pagar a una empresa que estaba inhabilitada, está en quiebra técnica e incumpliendo un contrato para construir el tren de molienda en la planta de Troche. Asimismo, habló de otras irregularidades que tuvo como protagonista al ahora ex presidente de la petrolera, Denis Lichi, en campaña política para la Gobernación de Cordillera.
“La cuestión de desabastecimiento de la cual están hablando es un cuento. Los números no mienten. Petropar tiene presupuestado para comprar combustible cada año entre 800 a 850 millones de dólares. Eso es para 12 meses. Cierto, hay que decirlo porque es verdad, este año quedaron corto porque se compró mal el combustible. Las formas en que se han realizado las compras en Petropar este año que pasó bajo la presidencia de Denis Lichi, es absolutamente escandalosa”, manifestó el experto, en entrevista con Canal GEN-Nación Media.
Villamayor preguntó: “¿No les parece curioso que en el peor escenario se tenía presupuestado gastar US$ 850 millones para compra de combustible y ahora para dos meses estén pidiendo US$ 260 millones?”. El abogado afirmó: “Hay otra cosa detrás de este pedido (de ampliación) que tiene poco que ver con compra de combustibles. En estos US$ 260 millones está también un pago adicional oculto a esta empresa que se había comprometido a construir el tren de molienda en Troche”.
Agregó que “un contrato de US$ 28 millones que se le adjudica a una firma que ya había sido inhabilitada por incumplimientos anteriores y que hoy está prácticamente en quiebra técnica. Ahí ya hay un gran perjuicio, causada por la anterior administración (de Lichi) de 6 millones de dólares que se le ha entregado a esta firma por una obra que va a ser de imposible cumplimiento, simplemente porque ya no tienen los medios”. Villamayor remarcó que “es eso lo que se trata de disfrazar dentro de esta suma descomunal, que absolutamente no corresponde”.
LLAMATIVA ACTITUD DE SINDICALISTAS
Por otro lado, el abogado señaló que insistentemente recibe mensajes de funcionarios de Petropar que son residentes del distrito de Villa Elisa, pero que ahora están registrados para votar en Cordillera, donde Lichi es precandidato para la Gobernación por el oficialismo. “Y esta gente no lo hace gratis. De eso se trata y eso es lo que está detrás de este pedido que repentinamente tiene un inusitado apoyo de los sindicalistas de Petropar”, acotó.
En ese sentido, mencionó a Gerardo Parodi, titular del sindicato de la petrolera estatal, que “tiene un montón de parientes cercanos metidos como funcionarios de Petropar, a través de la empresa tercerizada Dinamo, que es adjudicada con un contrato de nada más y nada menos que de G. 48 mil millones para tercerizar recursos humanos”.
SUPERPOBLACIÓN INNECESARIA
Villamayor resaltó otra irregularidad en torno a la estatal, la superpoblación innecesaria de funcionarios. “Petropar, con 230 estaciones de servicios de las cuales solamente 7 son propias, tiene más de 1.000 personales. Copetrol, por ejemplo, una empresa que tiene más de 2.000 estaciones de servicios no llega a 600 funcionarios. Estamos hablando de una grosera sobrepoblación del emblema estatal; gasto desmesurado e irresponsable que lesiona los intereses de la empresa y esta sobrepoblación absolutamente innecesaria”, concluyó.
