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ASUNCIÓN.- Acosado por las investigaciones fiscales y las publicaciones periodísticas, el diputado añetete Ulises Quintana prometió dar la cara y presentarse ante la Fiscalía que investiga los negocios y cómplices del capo del narcotráfico Reinaldo Javier Cabañas. Luego de mostrar reticencia ante la posibilidad de perder sus fueros, ahora dijo que él mismo pedirá a sus colegas su desafuero para permitir que se lo investigue.
Quintana sigue proclamando su inocencia, al afirmar que conoció a Cabañas a través del deporte y que jamás supo cuáles eran, en realidad, los negocios de quien está señalado como el cabecilla del narcotráfico en el Alto Paraná. Aunque insista en que no es cómplice en esos negocios, Quintana deberá explicar ante la Fiscalía por qué había dicho que el presunto narco había aportado dinero a su campaña y hasta para las demás candidaturas de Colorado Añetete, movimiento del presidente Mario Abdo Benítez.
Si bien ahora asegura no saber en qué momento se tomó la foto en el quincho de la casa de Abdo Benítez, en la que aparece el presidente con el mismo Cabañas, seguramente fue el mismo Quintana el artífice del encuentro, puesto que era con él con quien tenía contacto directo el ahora detenido.
Es cierto que el presidente restó importancia a la foto que corrió por las redes sociales y los medios de prensa, diciendo que fueron muchas las personas que lo visitaron en su casa, que hacía las veces de PC de su candidatura durante las internas, aunque la cosa podría tener mayor implicancia puesto que no es fácil aceptar como normal una foto en la que está el jefe de Estado de un país posando al lado de un capomafioso. Y si esta situación fue gerenciada por el diputado Quintana, sus compañeros de movimiento no se la harán pasar tan fácilmente, puesto que su acción tiene comprometida la imagen del presidente de una manera inesperada habida cuenta de que la postura de Colorado Añetete ha sido siempre radicalmente opuesta a las mafias del narcotráfico y ha orquestado varias campañas infundadas de ataque a la imagen del expresidente Horacio Cartes, precisamente por su supuesta vinculación con las mismas.
Luego de tener una actitud bastante dubitativa, posiblemente ya por presión de su entorno, Quintana manifestó ayer que hoy, a primera hora, se pondría a disposición de la Fiscalía y pediría a sus colegas su desafuero, aunque hasta ahora el juez Rolando Duarte no lo ha solicitado a la Cámara de Diputados.
Mostrando autocompasión, el diputado dijo que “soy una persona honesta y trabajadora. Me duele lo que me está ocurriendo, pero son cosas que tenemos que afrontar; la vida está hecha de desafíos e incluso cosas injustas”.
