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ASUNCIÓN. Una ronda más del entredicho, con denuncia penal de por medio, entre el titular de la Dirección General de Aduana (DNA), Julio Manuel Fernández Frutos, y el senador colorado Martín Arévalo. El primero debe concurrir este miércoles a la Cámara de Diputados, donde será interpelado en relación con la denuncia que formuló ante fiscalía sobre supuesto tráfico de influencias por parte del legislador en la propia Aduana.

En su momento, Arévalo devolvió el golpe indicando que Fernández Frutos habría incurrido en una lesión de confianza en perjuicio de Aduana, por un supuesto robo de mercaderías cuyo valor sería de 3.000.000 de dólares.

El grueso cruce de guantes quedó flotando, sin mayores novedades de Fiscalía, o de instancias judiciales, donde el sueño de la mercadería supuestamente desaparecida radicó denuncia.

Ahora, Pedro Alliana, titular de Diputados, mediante Resolución N° 3.352 convocó a sesión extraordinaria a fin de considerar como único punto del Orden del Día, la “Interpelación al señor Julio Manuel Fernández Frutos, director nacional de Aduanas”.

El cuestionario que deberá responder el titular de Aduanas incluye datos ampliados acerca de la denuncia que formuló contra Arévalo sobre un supuesto tráfico de influencias en la Dirección Nacional de Aduanas.

Asimismo, se le requerirá citar nombres de los funcionarios de Aduana que pretendieron ser ascendidos o trasladados, los cargos actuales y los solicitados, y cuáles fueron las medidas que adoptó Fernández Frutos con los citados funcionarios.

De igual modo, deberá aclarar cuáles los mecanismos para que un funcionario de Aduanas ascienda al cargo de administrador, director y/o jefe de departamento y división, el salario de cada uno de ellos y las directivas que deben seguir los citados funcionarios en la denuncia de potenciales hechos de corrupción.

Otro de los puntos que debe explicar Fernández Frutos refiere a la denuncia realizada por el senador Arévalo, a quien el funcionario, según la denuncia, le había solicitado “silenciar, callar, desenmascarar y revisar a los diputados nacionales” por investigar y denunciar hechos de corrupción.

También se le va a solicitar al interpelado confirmar dicha denuncia y, en su caso, el contexto y el alcance de sus dichos.