ADN Digital
Artículos relacionados
La definición del precio del pasaje sigue sin tratarse en la Junta Municipal de Ciudad del Este. El concejal Teodoro Mercado (PLRA) aseguró que existe una gran apatía por parte de la ciudadanía, por no exigir el cumplimiento de la ordenanza que fija el precio del pasaje a G. 2.500. Actualmente, los empresarios de la capital del Alto Paraná cobran G. 2.900 por el pasaje, sin que la Intendencia ni el legislativo lo hayan autorizado.
CIUDAD DEL ESTE.- Al ser consultado el concejal Teodoro Mercado (PLRA) del motivo por el cual no se trata el tema del aumento ilegal del precio del pasaje en la Junta Municipal, el mismo sostuvo que “resulta difícil” reunir a todos los concejales para un debate a fin de definir el tema. Los ediles volvieron a ignorar el problema del pasaje, durante la sesión ordinaria de la Junta realizada ayer.
Asimismo, Mercado cuestionó la apatía de la ciudadanía de la capital del Alto Paraná, dado que ésta no se ha manifestado en contra de la suba irregular del pasaje. “Cuando se convocó a una movilización, solamente aparecieron una pocas personas. No existe esa presión para que la ordenanza se cumpla. Si en Asunción se diera este tipo de hechos, la gente no le iba a dejar en paz a sus autoridades”, expresó.
Señaló que la falta de presión de la ciudadanía, genera la inacción de la intendente de Ciudad del Este, Sandra McLeod de Zacarías (ANR), quien hasta la fecha no ha intervenido para que los colectivos que cobran más de G. 2.500 por el pasaje sean llevados al corralón municipal por incumplir la Ley Orgánica Municipal.
Recientemente, el concejal Miguel Prieto (PLRA) había afirmado que tras un análisis entre los ediles, se podría fijar el precio del pasaje a G. 2.700.
Los transportistas agremiados a la Asociación de Empresarios del Transporte Público de CDE (Asetrapace), tomaron la decisión unilateral de incrementar el precio del boleto, pero no recibieron ninguna sanción por parte de la institución.
Mientras la Junta y la Intendencia demuestran poco interés ante el abuso cometido por los empresarios del transporte público, los usuarios siguen utilizando un pésimo y costoso servicio, con vehículos vetustos e incumplimiento del itinerario.
