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ASUNCIÓN.- Una vez presentado el proyecto de modificación de reajuste del Salario Mínimo el Congreso tiene la facultad de llamar a sesiones extraordinarias con el objeto de acelerar su estudio. Guillermo Sosa, ministro del Trabajo adelantó que el proyecto será remitido mañana lunes 26. Varios congresistas aseguran que el proyecto tendrá buena acogida.
El propósito del Poder Ejecutivo es modificar el sistema actual de reajuste del salario mínimo. Hasta hoy su tratamiento depende de una inflación del 10%, según la normativa, artículo 255, del Código Laboral.
Una vez aprobada la modificación del mecanismo actual, se realizará el aumento del salario mínimo y que, de darse inmediatamente este año, sería 7,2%, atendiendo que es la inflación acumulada desde el último incremento, que fue en marzo del 2014.
Oscar Salomón, senador colorado, calificó de “urgente y debe ser tratado cuanto antes, no hay tiempo que perder”.
Asume que una vez que se le dé entrada, las Cámaras “deberían llamar a sesiones extraordinarias y de ser posible aprobarlo lo más rápido posible”.
Rescató el legislador el consenso de trabajadores y empresarios “una cuestión pre acordada, que no dependa solo de que algunos indicadores suban o bajen. Creo que es justo que haya un acuerdo previo y se tenga una regla básica, en el sentido de que año a año o cada cierto tiempo”, dijo.
“MÁS PREVISIBILIDAD A LA ECONOMÍA”
Los analistas independientes apuestan a la pertinencia del proyecto que el Ejecutivo presentará mañana lunes en relación a una profunda modificación de reajuste del Salario Mínimo. Para Manuel Alarcón, economista y ex viceministro de Economía, este plan evitará movilizaciones de trabajadores que cuestan mucho dinero y pérdidas para sus empresas y dinamizará la economía. Apunta que una revisión anual “da mayor previsibilidad a la economía”.
El profesional destacó que una vez aprobado en el Congreso “lo que se debe hacer es insistir con la formalización laboral; y así incorporar a más trabajadores a las planillas laborales de empleados que perciben el salario mínimo y seguridad social”.
Estima que estas políticas de empleo y salario “obligará al Banco Central a ejercer mayor y más eficiente control de precios; deberán ser más estrictos”, dijo Alarcón.
