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El presidente del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (INDERT), Lic. Justo Cárdenas, entregó en la mañana de ayer un total de 1.075 certificados de adjudicación a beneficiarios de la Reforma Agraria en Chino Cué, distrito de Itakyry, departamento de Alto Paraná. Se trata de un avance histórico en la regulación de estas emblemáticas tierras. El año pasado, tras una espera de 17 años, con este gobierno se empezó la legalización de estas ocupaciones, cuya historia es una sucesión de acontecimientos violentos, con muertes incluidas, además de manipulaciones electoralistas, por ejemplo por parte del entonces candidato a presidente, Nicanor Duarte Frutos.
ITAKYRY, Dpto. del Alto Paraná.- El titular del INDERT, Justo Cárdenas, recordó que al inicio del proceso de regulación de tierras en Chino Cué, tuvo mucha oposición de parte de algunos sectores, “pero contra todas las barreras puestas, este gobierno está demostrando que hay seriedad en el trabajo y esto es lo que posibilita dar tranquilidad y seguridad a las familias de esta comunidad”.
Cárdenas subrayó que estos logros históricos en Chino Cué responden a directivas específicas dadas por el presidente de la República, Horacio Cartes, en el marco de la lucha contra la pobreza en el campo.
Mediante el trabajo del Sistema de Información de Recursos de la Tierra (SIRT), que es una gerencia del INDERT, ayer recibieron sus documentos las familias de comunidades de Chino Cué (591 adjudicaciones), San Miguel Arcángel (32 adjudicaciones), La Candelaria (186 adjudicaciones), Táva Rory (96 adjudicaciones), Fortuna Unida (52 adjudicaciones), Nueva Fortuna (118 adjudicaciones).
UNA HISTORIA DE VIOLENCIA Y MANIPULACIÓN
En julio del año pasado, tras 17 años de espera, el gobierno de Cartes entregó los títulos de propiedad a las primeras 300 familias de Chino Cué, lo que vino a cambiar la historia de violencia de este asentamiento. Por años, los ocupantes fueron desalojados violentamente; algunos fueron apresados y otros asesinados. En tiempos electorales, los políticos prometían que las tierras serían de ellos. Pero luego eran abandonados a su suerte.
Una de la historia más recordada fue cuando en el 2003, el entonces candidato a presidente de la República, Nicanor Duarte Frutos, utilizó electoralmente a los campesinos, pero luego no cumplió con su promesa. La revista “Granos”, en aquella época, publicó la foto del grupo de labriegos de Chino Cué a la vera de la ruta, esperando a operadores políticos para una reunión partidaria en apoyo a Duarte Frutos, en Ciudad del Este, pero jamás fueron recogidos. Entonces Nicanor ya le daba la espalda. Tuvieron que gestionarse camiones para que puedan volver a sus casas. Pese a haberlos utilizado electoralmente, el exmandatario y actual precandidato a la senaduría, no les dio una solución a la problemática de los ocupantes de esas tierras.
“POR PRIMERA VEZ EN LA HISTORIA SE FAVORECE A LAS FAMILIAS CAMPESINAS”
El presidente de la Coordinadora de Comisiones Vecinales de Chino Cué, Fermín Moreno, expresó que las familias campesinas están agradecidas y felices por la regularización de tierras. “La comunidad está observando el rápido avance de los trabajos que se hacen con honestidad”, sostuvo. Reconoció el logro y dijo que “luego de 18 años de sacrificios, hoy día la población ve que por primera vez en la historia hay un gobierno que inicia un proceso de legalización de tierras a favor de las familias campesinas. Esto permitió que los pequeños productores accedamos a un pedazo de tierra para cultivar”.
“Atrás quedaron los tiempos en que vivíamos en zozobra, bajo amenazas de desalojo y en medio de precariedades, por la inseguridad jurídica, ahora eso cambió gracias al gobierno del presidente Cartes”, enfatizó Moreno.
Destacó que aún que “un pedazo de tierra de 1.500 hectáreas para completar las 14.800 ha de Chino Cué pendientes de regularización.
Participaron del acto, junto al presidente del Indert, Ing. Justo Cárdenas, el gobernador de Alto Paraná, Justo Zacarías; el diputado nacional Ramón Romero Roa; el intendente municipal local, Carlos Soria, y otras autoridades municipales y departamentales.
