KOUROU.- Europa emprendió por primera vez una misión a Mercurio con el lanzamiento de la sonda BepiColombo, enviada conjuntamente con la agencia espacial japonesa, JAXA. El objetivo de la misión es entender el origen y evolución de ese planeta, el más pequeño y cercano al Sol.
El módulo de transferencia y los dos orbitadores científicos, uno europeo y otro japonés, cumplieron con el horario previsto y partieron el viernes a las 22.45 (misma hora que en la Argentina) del centro espacial de Kourou, en la Guayana Francesa.
El despegue a bordo de un cohete Ariane 5 iluminó con fuerza la noche cerrada de ese departamento francés de ultramar, ubicado entre Surinam y Brasil, y concluyó la fase de lanzamiento 26 minutos y 47 segundos después, entre aplausos y expresiones de alivio por parte de los equipos.
“Esto no es más que el principio del viaje, pero ya es un gran día para la ESA, y no solo para ella”, afirmó su director general, el alemán Jan Woerner.
El cohete había sido trasladado a la plataforma de lanzamiento 30 horas antes. 120 técnicos “pilotaron” posteriormente la operación a distancia, en un búnker situado a 2,3 kilómetros, y totalmente protegido de eventuales accidentes.
Tras el lanzamiento de cuatro satélites Galileo en julio y del Aeolus en agosto, desarrollado para medir el viento en las capas de la atmósfera y contribuir a afinar las predicciones meteorológicas, BepiColombo es la tercera misión del año para la ESA.
El trabajo combinado de los dos orbitadores intentará confirmar la existencia de hielo y su procedencia, responder a por qué su campo magnético está a 400 kilómetros del centro del planeta, o determinar cómo se contrajo su interior, hasta provocar una reducción de 7 kilómetros de su radio.