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La ex viceministra de protección de los derechos de la Mujer, Liliana Zayas, comentó en Tempranísimo, por la 970 y GEN, que desde el ministerio iniciaron una campaña de desprestigio en su contra a causa de haber renunciado al cargo por no estar de acuerdo con la actitud oficial asumida a favor del jefe del Gabinete, Juan Ernesto Villamayor, lo que demuestra la forma como tanto la ministra, Nilda Romero, como su equipo, operan.

“Veo que están circulando datos con mala fe. A esto me refiero; estas personas que están encargadas ahora hacer una campaña de desprestigio, en esta etapa de mi vida, luego de ser fiscal acusador, realmente ni me roza porque me doy cuenta de que esa es la manera que ellas operan. Especialmente Carmen Pappalardo, responsable de protocolo, es una señora mayor que se dedica a hacer esto”, comentó.

Recordó que tiene 25 años en la administración pública, desde el Poder Judicial, la Universidad Nacional de Asunción y el Ministerio Público, y aceptó formar parte del equipo de Romero en el Ministerio de la Mujer porque le pareció una excelente oportunidad de pasar del plano punitivo al de la prevención.

El problema surgió ante el cuestionado y criticado comunicado del ministerio que denunciaba una supuesta agresión de género sufrida por las mujeres que acompañaban a Villamayor en un restaurante público en el que fue abucheado el sábado pasado. Zayas dijo no estar de acuerdo pero, como en todos los casos, la decisión final la tomó Romero.

En una reunión de la que participó todo el staff de la ministra, analizaron las repercusiones negativas del comunicado y cuando ella, Zayas, propone que se retracte y pida disculpas, recibe una andanada de críticas, tanto de la misma Romero como de sus colaboradores.

“Luego veo la situación de que las dos viceministras, empiezan a contestar las manifestaciones de la ciudadanía y una de ellas utiliza la frase ‘mujerín’. Eso me impactó, una vida de lucha para visibilizar todos los estereotipos y nada menos que una viceministra del Ministerio de la Mujer utiliza esa palabra. Y la otra, que desde sus vacaciones da indicaciones de retuitear para salvar al jefe del gabinete”, manifestó.

Comentó que “yo esperé una reacción de la ministra, una llamada de atención a las dos viceministras. Nos llama a decir que está preocupada por la sobrina de la viceministra, que había una campaña. Estaba preocupada por la reacción mediática más que hacer una llamada de atención del lenguaje de su viceministra”.

“Dicen ahora que yo propuse el homenaje al presidente en el Día de la Mujer Paraguaya. No tengo nada en contra de él pero cuestiono que ese día no se visibilice a la mujer paraguaya. Por qué renunciaría yo a mi cargo si hubiese sido la que lo propuso”, concluyó.