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ASUNCIÓN.- El dirigente de la Confederación de la Clase Trabajadora (CCT) y exsindicalista de la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción (UCA), Julio López, durante una entrevista con La Nueva 107.5, anunció la presentación de una denuncia por prevaricato contra la jueza Sandra Bazán, por haber rechazado la medida cautelar promovida para que los gremialistas despedidos de la alta casa de estudios sean repuestos en sus respectivos cargos, teniendo en cuenta que gozan de fueros sindicales.
“Seguimos resistiendo aquí ante las arbitrariedades, no solamente ya de la patronal, sino de la propia justicia”, dijo López.
López consideró que la magistrada violó flagrantemente el artículo 321 del Código Laboral, al confirmar la suspensión de los dirigentes gremiales de la UCA, sin que exista una causa probada por parte de la patronal para disponer la sanción. “Además la ley es clara, que mientras dure el proceso el funcionario debe estar trabajando y no suspendido; sin embargo, nosotros estamos suspendidos”, se lamentó el gremialista.
“Es una forma de coartar la libertad sindical, pero esta medida vamos a apelar. Además vamos a denunciar a la jueza ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y vamos a recusar a su presidente que es el Dr. Cristian Kriskovich, por ser unos de los referentes de la UCA”, refirió.
Recordó que fueron acusados supuestamente por ejercer violencia física, contra estudiantes, profesores y contra miembros del Consejo de Gobierno de la UCA. “Mintieron bien grande como para asegurar que no sea resuelta la medida cautelar que presentamos, pero estos hechos nunca fueron probados. Lo más grave es que hay compañeros que están pasando una situación difícil porque no están percibiendo sus salarios”, se quejó López.
Este tema (despidos) se produjo a finales del año pasado. “Nosotros no creímos que se iba a llegar a este extremo, actuaron sin escrúpulos, sin importarles las formas. Evidentemente estábamos molestando demasiado y la paciencia de la representante de la Santa Iglesia llegó a su fin, entonces ya no le importó la forma”, manifestó el sindicalista.
Asimismo, destacó que entre los despedidos, el de menor antigüedad tiene 18 años y lo llamativo del caso es que recién después de más de una décadas que están en la institución descubren que son violentos y lo echan. “Es evidente que es una violación de los Derechos Laborales y sindicales”, aseguró López.
Los antecedentes revelan que el Consejo de Gobierno de la Universidad Católica, tras un sumario que califican de “irregular”, decidió el despido de Julio López, Juan Abdala, Carolina Rodas y César Benítez, principales dirigentes de los administrativos de la entidad.
