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ASUNCIÓN. Ni bien se supo de su renuncia al cargo al ser imputado por el fiscal Osmar Legal, Rodolfo Friedmann anunció en varios medios “amigos” que volverá al Senado para dar la pelea política en contra de la Fiscalía, a la que volvió a acusar de estar manejada por Horacio Cartes.

Aseguró que sigue gozando de la confianza del presidente Mario Abdo Benítez, quien le recomendó que volviera al Parlamento para “dar la pelea” en el plano político. Más allá de que Friedmann jamás debió haber ocupado una banca en el Senado, ya que no fue ni electo ni proclamado, la cosa de su regreso no es tan sencilla porque es un claro caso de tráfico de influencias, causa fundamental para que un legislador pierda su investidura.

Aunque sus defensores intentarán decir que el delito de tráfico de influencias no ocurrió mientras ocupaba su banca ya que fue durante su tiempo como gobernador del Guairá cuando utilizó su poder para beneficiar con licitaciones a la empresa que le pertenece, lo cierto es que la situación irregular continuó y en este momento sigue siendo el mayor accionista de ESSA S.A., que sigue siendo la principal proveedora del almuerzo escolar para escuelas del departamento.

Friedmann sigue traficando influencias para beneficiar a su empresa y lo hace ya sea como senador o como ministro porque conserva gran parte del poder que tenía como gobernador del departamento. Por lo tanto, los senadores tendrán que pensar seriamente en realizarle un juicio para decidir su pérdida de investidura. Más aún cuando se han dado destituciones bastante irregulares, como el caso del liberal Dionisio Amarilla, quien no estaba imputado y sobre el que ni siquiera se pudo comprobar fehacientemente dicho tráfico de influencias.

Puede que esto resulte difícil habida cuenta del pacto político que rige en este momento en el Senado y que fue el que llevó a la Presidencia al oficialista Óscar Salomón. Sin embargo, considerando que en los casos anteriores los legisladores expulsaron de la cámara a varios colegas fue suficiente la mayoría simple, es posible que en el caso de Friedmann esto pueda concretarse.