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El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto, apenas asumió y prohibió el uso de inmovilizadores en los vehículos mal estacionados, argumentando que es una fuente de corrupción. Pero ahora aparecieron las grúas, cuyo servicio no fue licitado y el costo es muy superior, y denuncia que existe todo un negociado. El jefe comunal, quien durante su campaña había anunciado que sería totalmente transparente y que se presentaría a rendir cuenta ante la Junta Municipal ahora, se niega a hacerlo.
CIUDAD DEL ESTE.- El uso de los inmovilizadores o cepos tenía un costo de unos 300 mil guaraníes para los infractores, y el dinero era para las arcas municipales. El mismo era colocado a los autos mal estacionados en la zona céntrica. El intendente Prieto apenas asumió y prohibió su uso.
En su lugar aparecieron las grúas que retiran los rodados mal estacionados y tienen un costo de entre 700 y 1.000.000 guaraníes y la mayor parte de la plata no va a las arcas del municipio.
El director de la Policía Municipal, Alberto Daniel Espinoza, dijo que quienes estacionan en lugares prohibidos deberán abonar 420 mil guaraníes de multa. Pero los infractores indicaron que pagan hasta un millón de guaraníes, incluyendo el servicio de grúa.
Atendiendo a que es un servicio que la comuna regula su uso, el mismo debió ser licitado. Pero la actual administración municipal no lo hizo y al parecer se hizo en forma directa lo que está en contravención a lo que dispone la Ley 2051 de Contrataciones Públicas.
Pese a haber prometido transparencia total, el intendente no revela las condiciones en que se contrató los servicios de grúa. Hasta el momento, no dio a conocer a la población los detalles de los contratos firmados con las empresas que realizan el servicio si es que existe.
El titular de la Policía Municipal tampoco da detalles sobre el tema. El citado recientemente pidió la contratación de 60 funcionarios, que es una paradoja, atendiendo a que la comuna está echando a funcionarios, y el mismo pide que se contraten a nuevos.
Se desconoce la nómina de las firmas que realizan el servicio, quienes son sus dueños. Todo es manejado en forma hermética en la comuna esteña.
SE NIEGA A DAR INFORMES A EDILES
El jefe comunal, Miguel Prieto, se niega a dar informes de la comuna, pese a que el mismo autodenominó “intendente de la transparencia”. Los concejales enviaron varios mensajes pidiendo informes, que no tienen respuestas, entre ellos sobre el uso de la grúa.
El jefe comunal mandó decir a los ediles que no va a responder ningún pedido de informes, ahora. Va a esperar que pasen 30 días, para luego responder. Esta actitud está en contravención a lo que dice la Ley Orgánica Municipal, de acuerdo a lo que dijeron los miembros de la Junta Municipal.
Un días después de haber sido electo, cuando se le preguntó sobre su relación con la Junta, dijo que acudiría todas las semanas con sus directores a rendir cuenta ante los diles. Recordó que uno de los temas que él siempre reclamó a la destituida intendenta Sandra McLeod, era la negación de la misma en ir ante el pleno del organismo a dar informes sobre su actuación.
El jefe comunal, junto a sus operadores políticos, impulsa un pedido de intervención de la Junta debido a que la mayoría de los ediles son opositores a su gestión.
