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ASUNCIÓN.- El diputado colorado Walter Harms criticó a quienes pretenden reducir el escrache hacia Juan Ernesto Villamayor como algo motivado por cuestiones políticas, lo que más parece opinión de gente cavernícola apoyada por sectores de la prensa que tienen absoluta falta de objetividad.
En Tempranísimo, por la 970 y GEN, el legislador dijo que “yo interpreto como una señal del hartazgo ciudadano hacia hechos que acontecen. Esa juventud que estaba muy alejada de la realidad política, hoy toma partido. Lo del sábado es el reflejo de lo que uno escucha en las calles o lee en las redes. Es el hartazgo de la ciudadanía hacia personas y hechos que acontecen”.
En un conocido restaurante, el sábado a la noche el jefe del Gabinete Civil de la Presidencia fue escrachado por los presentes, mientras intentaba festejar la víspera del día de los enamorados con una mujer y otra pareja, produciéndose incluso un enfrentamiento a trompadas y el retiro posterior de Villamayor y sus acompañantes del lugar.
Esto generó mucho apoyo de gran parte de la ciudadanía, aunque algunos pretendieron limitar lo ocurrido a algo orquestado por el cartismo en contra del abdismo. Entre ellos, se destaca Rodolfo Friedmann, quien mereció un gran espacio en uno de los diarios “amigos”. Harms dijo que “de Friedmann espero cualquier cosa; de él o quien escribe de manera horrible en sus redes. Pero algunos periodistas que tengan la opinión y como quieran contextualizar de la manera en que lo hacen me parece penoso. Por poco no fue Cartes el que se fu, cruzó el Maurice con la amenaza de que iba a cerrar el restaurante, acompañado de sus empleaditos, con la intención para que Villamayor sea agredido”.
“Somos un país bananero también desde la prensa porque hay absoluta falta de objetividad. El propiciador de todo lo que pueda pasar en el país es una persona (Cartes)”, en lugar de discutir los certificados hechos de corrupción, y se van a producir estos y otros hechos y no va a ser responsabilidad de Cartes ni del cartismo, como recordó uno de los conductores del programa.
Harms añadió que “este país es tan pequeño que nos conocemos todos. Yo tal vez no pueda dimensionar qué ocurre en Amambay, pero lo que ocurre en Itapúa, Misiones, Caazapá, donde estoy cerca; me dicen que la corrupción está en todas las escalas, hay gente que se vuelve rica en poco tiempo y nosotros que todos los días tenemos que levantarnos y salir a batallar porque no tenemos otro camino; eso realmente rebela, y así ocurre eso, que para mí es sano”.
Refiriéndose al comunicado del Ministerio de la Mujer, consideró “penosa” la actitud de la ministra, Nilda Romero. “Si fuera el comunicado 256 de su gestión, estaría bien. Pero no hay ninguna reacción sobre asesinatos, violaciones, violencia contra la mujer, nada, nunca, a pesar de que es un mal endémico. Y un domingo a la tarde se tomó el trabajo de querer reflejar algo que no ocurrió”.
