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ASUNCIÓN.- El Ministerio Público imputó ayer al comisario principal, Tomás Paredes Palma, subjefe de Investigación de Delitos, por inducción a un subordinado a cometer un hecho punible. El policía estuvo en la sede del Directorio del PLRA, en la noche en que asesinaron al joven Rodrigo Quintana. La investigación de la causa está a cargo de la fiscala Lorena Ledesma, quien solicitó la prisión preventiva para Paredes Palma.
De la misma forma, también fue procesado el oficial Guido Amarilla, quien aparecer en las grabaciones cuando disparaba a la puerta de un sanitario donde se encerraron varias personas, entre ellas incluso parlamentarios liberales. Amarilla, fue imputado por tentativa de homicidio doloso.
Conforme a la fiscala Ledesma, los agentes de Investigación de Delitos, no estaban afectados a los operativos policiales en la manifestación del pasado viernes 31 de marzo. Debían de actuar bajo las directivas del entonces comandante policial, Críspulo Sotelo. En este punto, la Fiscalía allanó días atrás la Comandancia de la Policía Nacional y levantó varios documentos como evidencias, entre ellas disposiciones de servicios. Entre las mismas, según la representante de la sociedad, no aparecen notas que afectan al comisario Tomás Paredes Palma y su equipo.
Días atrás, durante su comparecencia en la Fiscalía, el jefe policial, indicó que llegó a la sede del PLRA 20 minutos después del asesinato de Quintana. Pero las imágenes del circuito cerrado del local, lo muestran dentro de la sede partidaria, específicamente en el garaje ordenando a los agentes a su cargo y otros subalternos.
