ITAPÚA.- Un chequeo médico confirmó que la niña sufrió unos rasguños y desgarro. Mientras tanto, el menor de 15 años ya fue imputado por abuso sexual, en base a las declaraciones de los padres, el diagnóstico médico y el dolor que expresa la víctima en la parte genital.
El fiscal del caso, Enrique Díaz, investiga la denuncia de abuso sexual, supuestamente perpetrado por sus primos de entre 10 a 15 años. “Según las lesiones presumimos que la menor pudo haber sido violentada con algún objeto o manoseada, no fue exactamente coito”, indicó el fiscal.
El hecho se registró en Itapúa, cuando la niña fue llevada a la casa de los abuelos y mientras lo adultos conversaban, la menor jugaba en la otra pieza, donde también estaban sus primos de 10, 11, 12 y 15 años. En un momento un gran silencio llamó la atención de la madre quien fue a verificar y no encontró nada raro, pero al volver a casa, la niña le manifestó que sentía dolor en sus partes íntimas.
A fin de determinar lo ocurrido la madre llevó a su hija a un hospital, donde le practicaron un examen y confirmaron que hubo violencia sexual.