La primera ministra británica, Theresa May, advirtió este domingo de que el Reino Unido afronta un terreno incierto si el acuerdo del “brexit” que ha negociado con Bruselas es rechazado en la votación parlamentaria de este martes. A la par de esta incertidumbre gana fuerza la campaña para un nuevo referéndum sobre el Brexit. May está en dificultades porque necesita 320 votos para sacar adelante el acuerdo y solo tiene 315 diputados conservadores.
LONDRES.- Cuando faltan dos días para que la Cámara de los Comunes decida si apoya o no el pacto, May señaló al dominical “Mail on Sunday” que las consecuencias de un rechazo implicaría que el país entrará en “aguas inexploradas” y en una “grave incertidumbre”.
La jefa del Gobierno advirtió a los diputados de que si deciden no respaldar el acuerdo, puede haber unas elecciones generales y habría, además, un “riesgo muy real de que no haya ‘brexit'”.
La “premier” conservadora hizo esta advertencia a raíz del profundo descontento que su acuerdo sobre la retirada británica de la Unión Europea (UE) ha generado entre los diputados de su formación, así como de gran parte de la oposición.
Varios diputados “tories” y de la oposición ya han adelantado que votarán en contra el martes al término del debate sobre el acuerdo.
SEGUNDA CONSULTA
La idea de una segunda consulta ha estado ganando apoyos entre políticos británicos de alto nivel y parte de la opinión pública, pero la situación política es tan incierta que resulta difícil saber si eso significa que habrá otra votación, cuándo o cómo podría llevarse a cabo, o cuál sería la pregunta.
RENEGOCIAR CON BRUSELAS
El exministro de Exteriores británico, Boris Johnson, dijo el domingo que Theresa May podría quedarse como primera ministra y volver a Bruselas para renegociar el acuerdo de divorcio con la Unión Europea en caso de perder la crucial votación que tendrá lugar en el Parlamento británico este martes.