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CAACUPÉ.- Aunque el Ejecutivo ya anunció varias medidas restrictivas para los peregrinantes en los días previos del 8 de diciembre, pareciera que la gente pretende aprovechar estas semanas para llegar hasta el Santuario, lo que igual provoca las temidas aglomeraciones y tientan a un contagio masivo del Covid-19.

Aunque la Iglesia sigue apelando a la conciencia ciudadana, el intendente Diego Riveros está desesperado, así que solicitó al gobierno que declare a Caacupé en fase 0 desde el 4, para que, directamente, la ciudad se cierre totalmente desde ese día y hasta el final del festejo mariano.

Hasta ahora, se estableció el cierre de la basílica a partir del 22 de noviembre, y del Tupasy Ycuá desde el 28. Pero eso hace que ahora acudan los fieles en masa, y ni la lluvia del fin de semana evitó la gran cantidad de peregrinantes.

“Ahora se está dando un fenómeno, que la gente se adelanta y ya viene. Entonces desde ayer ya no permitimos el ingreso a la zona de la explanada y del Ykya a las personas que están en el grupo de riesgo, solo podrán llegar hasta la plaza pero no a la Basílica”, informó.

Añadió que “si nosotros no vemos que la cantidad de gente no baja, el Gobierno deberá adoptar otras medidas. Ahora aún es controlable, pero vemos que algunos incumplen las medidas sanitarias. Desde Salud están viendo cómo está el movimiento y de acuerdo a eso van a pedir al Ejecutivo”.