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Alfredo Jaeggli, quien fuera senador liberal durante varios periodos, anunció que regresa al ruedo político con la intención de volver a ocupar una banca en la Cámara Alta. Dijo estar harto de que el PLRA se alquile a los zurdos y anunció que impulsará proyectos polémicos. Durante su desempeño como legislador, no aportó nunca nada bueno. Solo fue un payaso que intentó un golpe de Estado con el director de ABC Color.
ASUNCIÓN.- “Éramos muchos y parió la abuela” suele decirse cuando ocurren cosas que sobrecargan en demasía una situación. Es lo que parece que podría ocurrir en el 2018 según una amenaza lanzada por Jaeggli en estos días. Es como si en el Senado no existieran suficientes payasos, que lo único que hacen es perjudicar al país, para que ahora tengamos que soportar a este sujeto que durante 5 periodos integrando la Cámara Alta no hizo nada productivo, salvo lucirse con vehículos millonarios y presumir de su fortuna. Además de sus pantagruélicos festejos de cumpleaños, en una carrera incontrolable con Juan Carlos Galaverna para averiguar cuál de los dos era más idiota.
Todo el mundo respiró aliviado cuando Jaeggli anunció que se retiraba de la política y no volvió a presentarse en el 2013. El simple hecho de que personajes como él y Calé sigan ocupando bancas de manera casi perpetua en una de las cámaras del Congreso dan cuenta de lo mal que estamos los electores y el grave daño que nos causan las listas sábanas.
El año pasado saltó el escándalo de que el liberal, junto con Aldo Zuccolillo (dueño del diario ABC) había planificado un golpe de Estado, que fracasó, pero que demuestra a las claras el poco respeto a las leyes y a la Constitución que tienen ambos personajes. Por supuesto, ni la Fiscalía ni la Justicia movieron un solo dedo para investigarlos y procesarlos por el delito de sedición.
En estos 3 años transcurridos desde que dejó la cámara, Jaeggli intentó seguir ocupando espacio en la prensa, pero aunque perdió muchos kilos no ganó racionalidad, así que lo único que hizo fue el ridículo. Compró un nuevo Lamborghini y regaló un Porsche a su nieto de 18 años “para que tenga muchas mujeres”. En fin, siguió en lo mismo, haciendo ostentación de su dinero porque, pobrecito, es lo único que tiene. Critica a su partido por haber apoyado a Fernando Lugo, pero no recuerda que él lo hizo públicamente a la candidatura de Mario Ferreiro.
¡Qué Dios nos salve de que este personaje vuelva al Congreso!
