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Tal como lo habíamos advertido la semana pasada, Rodolfo Friedmann, con el apoyo de su entorno, logró la cantidad de firmas necesarias para solicitar una sesión extra del Senado que tendrá como objetivo archivar 3 pedidos de pérdida de investidura que habían quedado pendientes a la espera de la reglamentación de la disposición constitucional, que fuera recientemente vetada por el Ejecutivo.

Aunque con esto se benefician también el colorado Javier Zacarías Irún y el luguista Sixto Pereira, cuya pérdida de investidura habían solicitado algunas bancadas, el objetivo real de esto es lo que afecta a Friedmann, quien fue el propulsor de esta idea de convocar a una sesión extra del pleno para tratar y rechazar los 3 proyectos, de manera a eliminar definitivamente esa amenaza que, por lo visto, le molesta.

El pedido de expulsión de Friedmann había sido impulsado por sus correligionarios Sergio Godoy y Enrique Riera, quienes habían demostrado que el caso del exgobernador del Guairá cumple con todas las exigencias previstas en el artículo 201 de la Constitución, que establece la pérdida de investidura de un legislador.

Sin embargo, la férrea defensa a su favor que hizo Lilian Samaniego y la presunción de Desirée Masi de que la expulsión del guaireño era objetivo de Horacio Cartes, hizo que la mayoría del Senado postergara el tratamiento del tema aguardando la ley de marras, por lo que quedó ahí, como una espada de Damocles, pendiente sobre la cabeza de “Rolfi”, recientemente acusado por la Fiscalía en el caso del almuerzo escolar y la empresa Eventos y Servicios S.A. (ESSA).

Al convocarse la sesión para hoy a las 13, eso confirma que Friedmann tiene la mayoría necesaria para que los 3 proyectos de pérdida de investidura sean rechazados y pasen al archivo.