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ASUNCIÓN.– Kattya González logró dejar sin quórum ayer la sesión de la Cámara de Diputados, cuando colegas suyos se sintieron aludidos por sus expresiones y al no conseguir callarla con abucheos, decidieron abandonar la sala. La encuentrista denunció la violencia estructural de las instituciones y a los partidos políticos por haberse convertido en asociaciones ilícitas para delinquir y cuevas de delincuentes.
González inició su discurso criticando haber sido marginada por la Presidencia puesto que estaba inscripta en el primer lugar, pero le dieron la palabra primero a Manuel Trinidad y Carlos Portillo, cada uno de los cuales hizo su descargo por delitos por los que se los denunció.
La encuentrista afirmó que se viven días de creciente tensión y hay muchas señales del hartazgo ciudadano porque la violencia estructural de las instituciones públicas en general, y la Cámara en particular, no tiene límites.
“Hacer el trabajo no funciona. Porque sencillamente en este lugar no existe institución. Esta Cámara está convertida en un carruaje insolvente, en una olla que apesta. Hice mi mejor esfuerzo para entablar diálogos serios, poner en marcha acciones superadoras ante esta crisis, pero en cada sesión nos sorprendemos con actuaciones grotescas”, aseguró.
Dijo que “nos pagan para trabajar. Pero no hemos conseguido terminar el orden del día. Nada interpela nuestra moral. Hoy vengo a instalar un símbolo para las denuncias que de hoy en adelante voy a realizar. Pondré en evidencia algunas cuestiones que marcan la medida del hartazgo mío y de los ciudadanos comunes”.
“Los partidos políticos se han convertido en guaridas de delincuentes, asociaciones ilícitas para delinquir. (…) Con la excusa de que ganaron las elecciones y son mayoría están cegados por la vanidad y el poder”, aseguró.
Según González, desde la Presidencia de la Cámara no ha habido el menor interés por institucionalizar el trabajo. “Somos una estafa a la ciudadanía que paga con sus impuestos esta Cámara”. En ese momento fue interrumpida por los abucheos y mientras aseguraba que no la iban a hacer callar, aproximadamente 10 legisladores se retiraron de la sala dejándola sin quórum, por lo que su discurso fue cortado abruptamente.
Previamente, Trinidad presentó renuncia a su cargo de suplente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, molesto por denuncias en su contra por parte del presidente del Colegio de Abogados del Alto Paraná, Mauro Barreto, a quien también acusó Portillo como ser el artífice de la causa que lo investiga por tráfico de influencias.
