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CIUDAD DEL ESTE.- Un avivado delincuente fue detenido el lunes último, en horas de la noche, luego de una prolongada persecución a tiros con la Policía. Se trata de Mario Luis Ojeda Vázquez (21), quien una vez reducido por los intervinientes, fue trasladado hasta el calabozo de la Jefatura de Policía del Alto Paraná.
Allí, en vez de preocuparse por su situación comenzó a reírse, explicando que no recurre a los hechos punibles por necesidad, sino por pura diversión, pues le emociona el momento en que agrede a su víctima. Dijo que el arma de fuego que utiliza para intimar a sus víctimas, le costó G. 300 mil y nunca se imaginó que lo llevaría a ganar plata.
Aseguró, que recauda al menos G. 3 millones por día en los diferentes asaltos perpetrados y que acostumbra atacarle a quien aparezca primero, pues nunca falla, excepto esta vez que le falló la motocicleta en la que se desplazaba. Todo lo robado invierte en farras y mujeres, explicó.
Como si fuera poco, comentó que nunca mató a nadie en un atraco, sin embargo, durante el enfrentamiento con los efectivos policiales de la comisaría 2ª, su intención era dispararle directamente aunque sea a uno de los uniformados.
Su detención se produjo sobre la avenida Monseñor Rodríguez, a la altura del kilómetro 8, de esta ciudad. El sospechoso circulaba en una motocicleta de la marca Kenton, color blanco, sin chapa.
Mario Luis se encontraba en compañía de un socio a quien identificó como Silvestre Antonio Fink (21), quien logró fugarse en medio del intercambio de disparos. Ambos al percatarse de la presencia policial, abrieron fuego contra los intervinientes, quienes tuvieron que responder de la misma forma.
Del poder de Mario Luis se incautó una mochila que contenía pasamontañas, un revolver, calibre 22 mm., con un cartucho percutido y (9) nueve sin percutir. El mismo fue puesto a disposición del Ministerio Público.
