Luego de poco más de un año y medio se encontró oculto en un cajón del despacho de la jueza Patricia González, un pedido de cooperación de la justicia brasileña para un embargo contra el narcotraficante Jarvis Chimenes Pavão. El documento fue hallado por el juez Pablino Escobar, quien interina la oficina de la magistrada, ya que la misma goza de permiso desde julio de este año porque acompaña a su marido, Roberto Melgarejo, quien fue nombrado como cónsul en España.
ASUNCIÓN.- Según los datos, el magistrado halló el texto hurgando entre los documentos. Indicó que en dicho exhorto, enviado en abril del 2015, se informaba al narco, recluido en ese entonces en el penal de Tacumbú, sobre el embargo de sus bienes en el vecino país.
El “descubrimiento” se realizó en el Juzgado Penal de Garantías N° 7 de la capital, pero no solamente este documento estaba encajonado en el despacho de la citada jueza, según constató Pablino Escobar, quien también encontró otros siete exhortos que no fueron tramitados, lo que, al parecer, revela una grosera negligencia de la magistrada. El juez Escobar comunicó de esta situación a la Corte Suprema de Justicia, la cual ordenó una auditoría del mencionado juzgado.
También se supo que luego de casi un año y medio del requerimiento de Brasil, el juez dará trámite al documento y notificará a Jarvis Chimenes Pavão, recluido actualmente en la Agrupación Especializada.
CERCANA A CALÉ
Patricia González, cuyas actuaciones están siendo investigadas por la Corte Suprema de Justicia, según los datos, sería cercana al polémico senador colorado Juan Carlos Galaverna, a quien benefició tiempo atrás y en forma rápida y muy llamativa sobre un amparo para prohibir publicaciones relacionadas a un video de contenido sexual en que aparecía el político. Además fue sorteada para entender en la causa del exrrector de la UNA, Froilán Peralta, otro de los cercanos del mencionado senador.