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ASUNCIÓN.- Salvo el oficialismo, todos los sectores políticos y gremios médicos tienen permanentes cuestionamientos a la gestión del ministro de Salud, Julio Mazzoleni, quien, sin embargo, hoy dijo contar con “apoyo político”, mencionando la cantidad de camas que se aumentaron en los hospitales públicos y los profesionales médicos que fueron contratados durante la pandemia.
Lo cierto es que, al inicio de la pandemia, la clase política firmó un cheque en blanco al gobierno con la Ley de Emergencia, a fin de que el sistema público se preparara para enfrentar a la pandemia; sin embargo, con el transcurrir de los meses, la gestión de Mazzoleni quedó en entredicho debido a que no pudo combatir la corrupción imperante en Salud Pública, y que hizo que hoy todos los hospitales estén colapsados.
Esta mañana se habilitó la ampliación del área de contingencia, con nuevas camas, en el Hospital Nacional de Itauguá con una inversión de más de 10.200 millones de guaraníes. La obra tendrá 5 pabellones de internación y 2 para el personal de salud, con 80 camas de internación, 16 de las cuales serán para Terapia Intensiva y 15 bocas para diálisis.
Además, según Mazzoleni, se produjeron números inéditos en cuanto a la contratación de personal de blanco, con un total de 10 mil nuevos contratos, lo que “refleja un gran apoyo político. Tuvimos mil personas que ingresaron por concurso y ahora está en curso otro concurso”.
Sin embargo, lo que olvida mencionar el ministro es que esta mejora del sistema sanitario se dio en el marco de la crisis sanitaria más grande de la historia, a pesar de lo cual no se dieron todas las mejoras previstas porque la ambición y la deshonestidad de quienes administran el dinero público primaron y no el interés por las necesidades ciudadanas.
